El discurso de Hollande no convence a Francia

alexandra fernández PARIS / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

CHRISTOPHE ENA | afp

Su oda al estado de derecho y a la democracia frente a la amenaza del Estado Islámico, aunque celebrada, llega tarde

11 sep 2016 . Actualizado a las 10:13 h.

François Hollande no se declaró formalmente candidato a las elecciones presidenciales en su intervención del pasado jueves, pero su discurso dejó claro su apetito por otro mandato más. Maltratado por los sondeos, Hollande pronunció un alegato patriótico sobre la guerra, la seguridad nacional, las fracturas sociales y todos los asuntos sensibles en los que ha evitado hurgar durante cuatro años.

Su oda al estado de derecho y a la democracia frente a la amenaza del Estado Islámico, aunque celebrada, llega tarde. La impopularidad del líder del Partido Socialista (PS) está más que afianzada. Según un sondeo de BFM TV del 7 de septiembre, el 88% de los franceses no quieren una reelección y el 73% no confían en Hollande para «defender y proteger los valores de la República». Una encuesta de Le Figaro y LCI del 6 de septiembre afirma que Hollande no pasará de la primera vuelta en las presidenciales de 2017, se enfrente a quien se enfrente. De acuerdo con el estudio, los pretendientes a la segunda vuelta con más posibilidades son Alain Juppé o Nicolas Sarkozy, de Los Republicanos, y Marine Le Pen, del Frente Nacional.

Tal pronóstico preocupa a los socialistas, que empiezan a agruparse en torno a nuevas alternativas. La más popular por el momento es Emmanuel Macron, exministro de Economía y Finanzas, que se mantiene en la zona alta en popularidad a pesar de no haber oficializado aún su candidatura. Su movimiento político En Marche! (¡En Marcha!) se ha convertido en el motor de una campaña presidencial cada vez más obvia que, paradójicamente, cosecha especial éxito en la derecha.

La baja popularidad de Hollande ha puesto incluso en evidencia la lealtad de su propio primer ministro. Manuel Valls desató todas las alarmas al declararse «primer ministro, pero libre» en una intervención del 29 de agosto que fuentes del Elíseo consideraron como un «discurso de candidato». Según Le Monde, el círculo cercano a Hollande acusa al político de origen español de jugar a un doble juego: por un lado, apoyar públicamente al presidente y, por otro, hacer todo lo posible por que Hollande no se pueda presentar para ser candidato en su lugar.

Mientras tanto, el Ministerio de Economía y Finanzas anunció el viernes una bajada del impuesto sobre la renta. Se trata de la cuarta del mandato de François Hollande que, a siete meses de las elecciones presidenciales, busca darle un vuelco a su popularidad. La decisión, que será puesta en marcha una vez se aprueben los presupuestos de 2017, beneficiará a unos cinco millones de contribuyentes de la clase media francesa. El Ejecutivo también planea rebajar el impuesto de sociedades, que pasará del 33,3% al 28% para fomentar la economía de las pequeñas y medianas empresas.