«No hay leche ni pan desde diciembre»

Laura Fernández Palomo AMÁN / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

Niños de Daraya forman un SOS durante la manifestación para pedir la entrada de ayuda, imagen que el consejo municipal colgó en Internet
Niños de Daraya forman un SOS durante la manifestación para pedir la entrada de ayuda, imagen que el consejo municipal colgó en Internet

La población ha vuelto a la calle pidiendo la destitución del presidente Bachar al Asad

11 mar 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Desde que los aviones ruso y sirios (que llegaron a arrojar 40 barriles bomba al día) dejaron de castigar la ciudad de Daraya, la población ha vuelto a la calle. No solo para pasear o reunirse, también para manifestarse con las mismas proclamas que enarbolaron en el 2011 pidiendo la destitución del presidente Bachar al Asad. Una demanda que se escuchó de nuevo este fin de semana en varias localidades opositoras aprovechando la tregua que entró en vigor el 27 de febrero. Pero el miércoles, Daraya clamó por otra urgencia más. Decenas de niños, rodeados de mujeres, formaron con sus cuerpos la señala de socorro SOS para exigir el fin de un asedio de cuatro años y la entrada de ayuda humanitaria.

«No hay leche ni pan desde diciembre», confirma Amjad, miembro del Consejo Local de este suburbio de Damasco, sobre las carencias que afrontan sus 8.000 residentes. «Hemos hecho acopio de medicinas de las casas que están destrozadas» por los bombardeos, explica sobre la falta de fármacos. El único menú que repiten los supervivientes uno y otro día es arroz y espinacas. No hay supermercados ni restaurantes. Hasta que el Ejército cortara la carretera hace tres meses, podían hacer la compra en la cercana Muadamia, «pero ahora ni eso».

La denuncia de Amjad coincidía con la publicación de un informe de la organización internacional Save the Children, que recuerda que al menos un cuarto de millón de niñas y niños sirios viven bajo estado de sitio, a pesar de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y del actual acuerdo de tregua que implica el desbloqueo y el reparto de medicinas, comida y combustible. Daraya no recibe un convoy humanitario de las Naciones Unidas desde el año 2012.

«La tregua al menos se mantiene, apenas hay combates, algún mortero, pero han dejado de caer bombas; no ha muerto nadie», ilustra Amjad en una conversación entrecortada por la débil conexión de Internet.

«Esperemos que se mantenga, que siga así», aspira consciente de que Daraya fue excluida de la tregua por Rusia y Al Asad por la presencia en el lugar del Frente al Nusra, filial de Al Qaida, aunque los residentes aseguran que la zona está administrada por el Ejército Libre Sirio (ELS) del frente sur. Antes de actual alto el fuego, Daraya fue duramente castigada por los bombardeos rusos y sirios, que decían luchar contra el Estado Islámico.