Stéphane Hache, que vivía en la calle de atrás, fue hallado muerto con una bala en la espalda y la ventana abierta
20 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La cifra de víctimas mortales de los atentados del pasado viernes podría aumentar de confirmarse que el hombre hallado muerto en su domicilio, en las inmediaciones de la discoteca Bataclan, fue abatido con una bala perdida durante el ataque de los yihadistas.
La víctima, Stéphane Hache de 52 años, se encontraba en su estudio, ubicado en la calle de atrás de la sala de conciertos, en el momento del asalto. Al no tener noticias de él desde esa noche, a la mañana siguiente sus padres alertaron a las fuerzas de seguridad, que se personaron en la vivienda donde lo hallaron muerto con una bala en la espalda y la ventana abierta. La Policía baraja la hipótesis de que el hombre fuera alertado por el ruido que se estaba produciendo en la calle en esos momentos, mientras el público del concierto escapaba corriendo para ponerse a salvo. Desde su ventana y observando lo que estaba pasando a ras de suelo, como muchos otros testigos (hay vídeos y fotografías de esas escenas de pánico), pudo haber resultado alcanzado por una bala perdida de las disparadas durante el ataque contra Bataclan, donde tres terroristas armados con Kalashnikov sembraron el terror entre los asistentes al concierto de la banda Eagles of Death Metal antes de inmolarse dos de ellos, mientras que el tercero fue abatido durante el asalto policial.
El cuerpo sin vida fue localizado el sábado pero la noticia de su muerte no trascendió hasta ayer. Stéphane trabajaba por temporadas en París como camarero y también en Sables d?Olonne, en el suroeste de Francia, donde residían sus padres. Un viejo amigo suyo declaró a un periódico francés que: «era un hombre muy profesional, encantador con mucha clase».