27 nov 2012 . Actualizado a las 07:00 h.
Llegó a la política italiana como un ciclón y hasta ahora siempre ganó. A sus 37 años Matteo Renzi ya sabe lo que es gobernar una ciudad complicada como Florencia. Sin pelos en la lengua, no duda en mandar al chatarrero a los viejos políticos como su rival. Sus posiciones fueron calificadas como «no de izquierda». Fue criticado por comer con Berlusconi.