El cartel de Sinaloa pierde otro líder a manos del Ejército mexicano

Culiacán / efe

INTERNACIONAL

Su cadáver permanece vigilado, para evitar otro robo como el de El Lazca

14 oct 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

El Ejército mexicano mató ayer a tiros a Manuel Torres Félix, alias El M1 o El Ondeado, quien presuntamente era uno de los líderes del cartel de Sinaloa, informaron fuentes de la Procuraduría de Justicia del Estado de Sinaloa (oeste del país).

Según fuentes de esas fiscalía, durante la madrugada de ayer se produjo un enfrentamiento entre miembros del Ejército y sicarios del cartel, en un camino que conduce al poblado de Oso Viejo, en el municipio de Quilá, en el que murió el presunto delincuente. En el lugar se incautaron numeroso armamento, municiones y material diverso.

Manuel Torres es hermano de Javier Torres El JT, quien fuera el lugarteniente del líder del cartel de Sinaloa, Ismael El Mayo Zambada, hasta que fue capturado en el 2004 y cumple ahora prisión en Estados Unidos.

Tras la detención de su hermano, Manuel presuntamente se convirtió en un importante sicario del cartel de Sinaloa, al mando de El Mayo y de Joaquín El Chapo Guzmán, el fugitivo más buscado de México. Según el diario La Jornada, dirigía una célula del cartel en la región sur del municipio de Culiacán.

Hace unos meses, la Procuraduría General de la República (PGR) lo integró a la lista de los delincuentes más buscados, ofreciendo 3 millones de pesos (unos 180.000 euros) por información que llevara a la detención de este capo, conocido por su manera sanguinaria de matar y por ser el personaje central de varios narcocorridos (canciones que hablan sobre las hazañas de los narcotraficantes).

El cuerpo fue trasladado a las instalaciones del Servicio Médico Forense, las cuales se encuentran fuertemente vigiladas por los militares para evitar un posible episodio de robo de cadáver, como el que tuvo lugar tras la muerte de Heriberto Lazcano El Lazca, jefe del cartel de Los Zetas, el pasado domingo en una funeraria de Sabinas, en Coahuila (norte). El Lazca murió en un enfrentamiento con la Marina mexicana y, tras ser llevado a la morgue en donde se le hizo la autopsia, un grupo armado entró en la funeraria y se llevó el cuerpo del segundo delincuente más buscado en México. La PGR busca a familiares directos del narco, para obtener muestras de ADN y compararlas con las obtenidas del cuerpo que fue robado.