Pilares para el futuro

INTERNACIONAL

09 nov 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Los conductos por donde fluyen gas y crudo fijan los pilares del futuro geoestratégico de Europa. Y Rusia llegó ayer directamente al corazón-motor de la UE: Alemania. El futuro energético de la principal potencia europea, aparcada la opción nuclear, necesitaba garantizar un suministro a salvo de intermediarios poco fiables como Ucrania y Bielorrusia. Merkel dio la gracias a Medvédev en el perfecto ruso que domina desde su niñez. Putin, en espera de ocupar de nuevo el sillón del Kremlin, se frotaba entretanto las manos. Sabe que Berlín será un buen aliado político, amén de económico, y que si se diera el caso de incumplir los estándares de democracia o derechos humanos, las críticas llegarían en forma de susurros. Una prueba del magnífico estado de salud del eje Berlín-Moscú, fraguado primero con la buena sintonía entre Kohl y Yeltsin y luego con la amistad personal de sus sucesores, Schröder y Putin.

Los tentáculos del monopolio energético ruso Gazprom se desparraman por Europa gracias a South Stream y Nord Stream, y marginan al problemático proyecto Nabucco, promovido por Turquía y por el que fluiría gas de Azerbaiyán, Irak e Irán.