Sospechoso por ser árabe

VIVIANE SCHNITZER DETROIT

INTERNACIONAL

Para atajar el brote racista contra los oriundos de Oriente Medio, Bush asegura que éstos «aman nuestra bandera tanto como nosotros» Tras los atentados terroristas del pasado martes en Nueva York y Washington, en Estados Unidos se ha desatado una campaña contra los musulmanes y árabes que residen en el país. Los miembros de esta comunidad se enfrentan a un nuevo terror: ser calificados por sus vecinos como sospechosos y apuntados con el dedo como responsables indirectos de la tragedia. Después de que el FBI identificara a una docena de secuestradores como procedentes de Oriente Medio, se han sucedido las amenazas y agresiones. El presidente George W. Bush, consciente de que éste es un riesgo evidente, recordó que «los estadounidenses de origen árabe aman a nuestra bandera tanto como nosotros». Bush recalcó que Estados Unidos «debe ganar la guerra (contra el terrorismo) a la vez que tratar a los ciudadanos de origen árabe y musulmanes con el respecto que se merecen».

14 sep 2001 . Actualizado a las 07:00 h.

Líderes de la comunidad árabe, incluyendo un imán, han recibido amenazas de muerte y desconocidos lanzaron una bomba incendiaria a un centro musulmán en Chicago, mientras que la Embajada de Kuwait en Washington ha recibido cientos de llamadas de nacionales denunciando incidentes racistas y ofensas verbales. Entre los incidentes, que se multiplican por horas, se incluyen palizas a estudiantes árabes en las universidades de Michigan y Carolina del Norte. Insultos Asimismo, numerosas publicaciones en árabe en todo el país han cerrado sus puertas y no contestan los teléfonos para no «recibir más insultos». La experiencia de los más de siete millones de musulmanes de piel oscura de EE UU, demuestra que el racismo aumenta en los días inmediatamente posteriores a un gran atentado, como ocurrió tras el atentado de Oklahoma en 1995. «Estamos acostumbrados a ser los chivos expiatorios. Basta tener la piel oscura, un bigote o la cabeza cubierta en el caso de las mujeres, y ya eres un criminal», dice Jim Zogby, director del Instituto Arabe Americano de Washington. «Entre nosotros hay víctimas, bomberos, policías, funcionarios del Pentágono, estamos en duelo como cualquier otro estadounidense», señala Zogby.