Clara Campoamor, icono universal de los derechos femeninos, levanta este martes simbólicamente la cabeza en el doodle de Google, casualmente, un día después de que el PP ratificase este martes en las urnas su apoyo a la reforma de la ley del aborto de Gallardón. Si la semana pasada el buscador rompió una lanza a favor de la igualdad, enarbolando la bandera gay en su logotipo con motivo de la inauguración de los Juegos Olímpicos de Sochi, hoy el gigante de Internet parece respaldar, con un guiño a Campoamor, el derecho de las mujeres a decidir.
Clara Campoamor (Madrid, 1888-Lausana, Suiza, 1972), en plena batalla por el derecho del sufragio de la mujer, sentenció que «solo hay una cosa que hace un sexo solo: alumbrar, las demás las hacemos todos en común». «No podéis venir aquí vosotros a legislar ,a votar impuestos, a dictar deberes, a legislar sobre la raza humana, sobre la mujer y sobre el hijo, aislados, fuera de nosotras». Esta declaración de intenciones, recogida en la obra El voto femenino y yo (Editorial Horas. Madrid, 2006), supone solo una pequeña parte del discurso vital que convirtió a Clara Campoamor en la defensora por excelencia de los derechos de la mujer.