







La afición del equipo vigués se movilizó para dar la bienvenida bajo la lluvia a su equipo antes del partido frente al Espanyol; luego, Balaídos rozó el lleno con cerca de 20.000 espectadores
12 abr 2025 . Actualizado a las 17:44 h.El primer recibimiento del Celta en la temporada 2024/2025 se hizo esperar a la jornada 31 y, a diferencia con el grueso de los más recientes, no era para alentar al equipo para conseguir una permanencia que ahora está virtualmente sellada, sino que se trataba de empujar hacia un objetivo más ambicioso: las plazas europeas. Y el celtismo respondió con una multitudinaria bienvenida en la que no faltaron las bengalas y en la que, eso sí, apareció la lluvia como invitada incómoda.
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Vídeo: M. Moralejo (La Voz). pic.twitter.com/8wXiobD1ub
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«Ya que estamos aquí mojándonos, ya pueden ganar», comentaba un aficionado durante la espera. Cerca, otro ironizaba con que «no venía a cuento» ante el despliegue de la afición. Más de uno se preguntaba también si habría escogido la ubicación correcta ante el cambio de ruta del autobús por las obras de Gol, cada vez más desmantelado en la fase previa a la demolición.
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Recibimento con choiva ??? #CeltaEspanyol pic.twitter.com/4uTd8e5VKM
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El celtismo quiere soñar.
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El celtismo quiere volver a Europa. pic.twitter.com/FYkllYOyBv
FILLOS DUNHA PAIXÓN. pic.twitter.com/JbNrypu6ZD
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Finalmente, en el momento en que llegó el vehículo celeste -pocos minutos después de la hora de la convocatoria- los paraguas se cerraron para poder agitar bien las bufandas y banderas al tiempo que los aficionados, de todas las edades, se dejaban las gargantas. Lo seguirían haciendo dentro, aunque sin poder lograr que los tres puntos se quedasen en casa.
Lo que sí se mantuvo una jornada más fue el gran ambiente en Balaídos, que, de hecho, registró la mejor entrada desde que la grada de Gol no está operativa. Fueron un total de 19.801 espectadores los que hicieron que el estadio estuviera cerca del lleno con su capacidad actual, superando en más de un millar a los que habían presenciado in situ la cita frente al Las Palmas. «Estoy orgulloso del ambiente que hay aquí, de la afición, de todo lo que se vive en Balaídos, del recibimiento y cómo nos han empujado. Es una pena que hoy no les hayamos podido dar una alegría», decía Giráldez en la rueda de prensa posterior.
1?9?.8?0?1? espectadores en Balaídos, mejor entrada desde que Gol no está operativa.
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Supera en más de mil al registro del partido anterior (18.549 vs. Las Palmas). pic.twitter.com/1ZeEfzgeLN
Pese a que no fue el mejor partido del equipo, la hinchada no dejó de animar a los suyos durante todo el partido. Quitando el susto del día, cuando una joven que seguía le partido desde Marcador Bajo necesitó ser atendida tras sufrir, aparentemente, un desmayo. Los espectadores de esa zona silbaron con insistencia pidiendo que se parara el partido, pero el colegiado del mismo, Busquets Ferrer, tardó en reaccionar, lo que le valió los abucheos e insultos de la grada, que no entendió su actitud.

La tarde acababa con la primera derrota en casa desde el mes de enero y la cuarta de la temporada. Nada que hiciera que los célticos no se merecieran una nueva ovación final de los suyos. Antes del comienzo, se había guardado un respetuoso minuto de silencio en memoria del excéltico Juan Antonio, recientemente fallecido.