Con siete atacantes en el plantel del Celta basta

LA VOZ VIGO

GRADA DE RÍO

M.MORALEJO

Marco Garcés admite que la posición de nueve queda debilitada tras el cierre de mercado, pero considera que el frente ofensivo celeste ofrece garantías

05 feb 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Tasos Douvikas fue un negocio redondo en lo económico, pero su marcha a última hora dejó al ataque del Celta mermado. Lo reconoció el director deportivo del club, Marco Garcés, en su comparecencia para analizar el mercado, pero al mismo tiempo, considera que los siete jugadores con los que ahora cuenta Claudio Giráldez para los tres puestos del frente de ataque son de total garantía para conseguir el objetivo de la permanencia. A partir del sábado, el entrenador debe decidir entre Iago Aspas (cuando esté recuperado), Borja Iglesias, Pablo Durán, Alfon, Williot Swedberg, Iker Losada y Fer López. El jugador con ficha del B seguirá alternando con el filial, pero cada vez tendrá una presencia más importante en el primer equipo.

«Doukivas jugó el 36,7% de los minutos, casi todos ellos al principio de temporada, y tenía una tendencia a la baja. Pensamos que los minutos que deja los va a absorber en mayor medida Pablo Durán, que parece que viene ganando la partida, apretando y jugando muy bien. Y después, los minutos que queden y que no cumpla Durán o Borja Iglesias creemos que pueden ir para Fer López, al que también verán cada vez más en Primera División. Ciertamente, no es un 9, pero cuando lo hablamos con Claudio, está de acuerdo», comentó el director de fútbol.

Garcés apuntó que había consensuado todos los movimientos, incluida la salida de Tasos, con Claudio Giráldez. «Está tranquilo con siete jugadores para esas tres posiciones de adelante, haciendo rotaciones o lo que se necesite», precisó sobre el parecer del técnico, que dio su visto bueno a la operación incluso en el escenario, que más tarde se confirmó, de no incorporar un sustituto: «Lo hablamos con Claudio desde el principio, cuando surgió la posibilidad de la salida de Tasos, dijimos si lo haría si no viene nadie y él dijo que sí, que estaba contento con las siete opciones para los tres puestos».

No obstante, el máximo responsable de la parcela deportiva reconoce que la posición de nueve, «obviamente, que queda debilitada, siempre es mejor tener tres jugadores buenos que dos», pero cree que «es suficiente para cinco meses con un solo torneo, que ya no está la Copa».

Porque en realidad, las dos salidas importantes en el mercado invernal afectaron al frente de ataque: primero, con el adiós de Jonathan Bamba, al que viene a sustituir Iker Losada, el único fichaje inmediato para el primer equipo, y más tarde, el del heleno, que pidió insistentemente salir hasta que lo consiguió.

Porque una vez que la salida de Douvikas era un hecho, el Celta intentó cerrar alguna de las operaciones que tenía en cartera, pero con apenas cuatro horas de mercado por delante, los precios se dispararon y en A Sede optaron por asumir el riesgo de tirar con lo puesto. «No valoramos traer a alguien por traer. Valoramos traer a alguien específico. Cuando esas opciones que teníamos como plan B, plan C, no salieron, o nos pidieron demasiado dinero o que nosotros pensamos que estaba por encima de la valoración, decidimos no traer por traer», escondiéndose Garcés los nombres, porque algunos será objeto de negociación de cara al mercado del verano. Todos los jugadores con los que hablaron eran versátiles para el frente de ataque, ninguno de ellos un nueve puro como Tasos.

¿Qué operaciones del Celta en este mercado invernal fueron acertadas y cuáles no?