El aficionado, que ha muerto a los 99 años, era uno de los socios del club nacidos el mismo año que la entidad
28 feb 2023 . Actualizado a las 17:41 h.El veterano celtista José Augusto Aguiar Lima fallecía este domingo a los 99 años. Era uno de los abonados del Celta nacidos en 1923 a los que el club vigués había homenajeado con motivo del 95 aniversario, en el 2018. Después, también había sido el elegido para representar a la afición después de que fuera nombrada la mejor de la liga en la temporada 2018/2019. Una vivencia única para él, como había contado su familia a La Voz en su momento.
«Es un honor y un privilegio que el Celtiña me elija para en nombre de nuestra afición recibir este premio por ser una de las mejores de España. Solo pido por nuestro Celtiña que la afición consiga de nuevo este premio el próximo año. Gracias, afición», había escrito para aquella ocasión tan especial por si le tocaba decir unas palabras. No fue el caso, pero su familia compartia el manuscrito para que su mensaje pudiera llegar al resto de apasionados del Celta, como lo fue él toda su vida.
Aguiar se había abonado al Celta desde 1950, pero en su momento contó a La Voz que había comenzado a acudir en 1940. De definía como gran apasionado del Celta: «Yo no soy vigués, soy de Tui y venía después de trabajar». Su destino era la grada de Marcador, que en aquella época no tenía cubierta. «Mi suegro se asustaba, porque cuando iba al campo y llovía, me entraba el agua por el cuello y salía por debajo de la camisa».
El 23 de agosto del 2018 le habían acompañado al acto de A Sede dos de sus hijos, José Carlos y María Rosa. Entre sus mayores orgullos estaba haberles transmitido el celtismo, así como a sus nietos y bisnietos. Uno de esos descendientes, su nieto Javier, contaba en el 2020 que tras enviudar, el Celta había sido también un gran refugio para él: «Después de fallecer mi abuela, aparte de nosotros, su familia, el Celta es lo que le distrae y le anima», decía. Ahora, se ha despedido de él a través de un hilo donde muestra que en su adiós sonó el himno del Celta, que sobre el féretro estaba su camiseta del cenenario y rosas azules y blancas:
