Frente al Cádiz, el vigués logró su segundo gol y luchó hasta el último instante
19 sep 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Santi Mina fue el mejor futbolista del Celta sobre el césped de Balaídos el viernes. Anotó su segundo gol de la temporada y, aunque ninguno de los dos sirvió para puntuar, el delantero vigués puso todo de su parte para que llegara un empate que, de haberse conseguido habría tenido mucho que ver con su actuación. En un momento en el que los rendimientos individuales están en entredicho y los jugadores de mayor calidad del equipo no están apareciendo como se esperaba, poco más se le podía pedir al canterano.
Si algo no se discute nunca de Mina es su capacidad de lucha y entrega, con mayor o menor fortuna. Y frente al Cádiz, no bajó los brazos en ningún momento. El céltico realizó tres tiros, dos de ellos a puerta -uno acabó en el gol que subía al marcador el 1-2-, ganó cuatro balones aéreos y tuvo un acierto en el pase de un 56 %, con un pase clave en su haber. Fue el céltico más destacado del partido y demostró que es el más inspirado en estos momentos.
Titular indiscutible para Coudet, Mina ha formado parte de todos los onces del actual entrenador cuando ha estado disponible (se perdió tres duelos por lesión la temporada pasada). Frente al Real Madrid había sido relevado por primera vez a los 63 minutos tras completar los tres primeros partidos y contra el Cádiz volvió a jugarlo todo y tuvo buena parte de culpa de que Balaídos pudiera creer hasta el final en un empate que no llegó. Con el tanto marcado, que se suma al del Bernabéu, es el primer jugador del Celta con más de un gol este curso y dos de los tres de jugada llevan su firma -el otro lo marcó Aspas de penalti-. La lista de goleadores célticos, de solo tres nombres, la completa Cervi con su tanto frente al Real Madrid.
Dos jornadas marcando
Además, ha conseguido marcar en dos jornadas consecutivas, algo que ya había hecho el curso pasado en dos ocasiones (ante Atlético y Elche y frente a Real Madrid y Alavés) y en una la temporada anterior (en las derrotas contra Osasuna y Elche de las jornadas 36 y 37). En el debe queda que ninguno de esos tantos ha servido para puntuar, como tampoco lo hizo el de Aspas.
