El banquillo del Celta, un solar

x. r. c. VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

LOF

Las lesiones de Hugo Mallo y Ferreyra dejan a Coudet con dos defensas, tres medios, un portero y ningún delantero para posibles cambios en el Camp Nou

16 may 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

«Las dificultades que tenemos están a la vista», comentó con cara de preocupación Eduardo Coudet en referencia al carrusel de bajas que asola al Celta en este final de campaña. En cada partido pierde efectivos y hoy, en el Camp Nou, no tendrá un solo delantero de repuesto disponible. Su fondo de armario se circunscribe a dos defensas, tres centrocampistas (uno de ellos, juvenil) y un portero (porque siempre descarta al tercero). Muy poca dinamita si tiene que cambiar el transcurso del partido.

Porque a las bajas esperadas de Jeison Murillo, Renato Tapia, Emre Mor, Rubén Blanco y Sergio Álvarez, el entrenador les unió las de Hugo Mallo y Facundo Ferreyra, además de quedarse sin Jordan Holsgrove porque el Celta B se juega el primer asalto por el ascenso esta noche en Extremadura y José Fontán aún está en período de confinamiento por haber dado positivo por covid-19.

Hugo Mallo disputó los últimos minutos del partido del miércoles en una defensa de cinco, pero el lateral no se recuperó de una sobrecarga en el abductor izquierdo y quedó descartado, lo que consolida a Kevin Vázquez como lateral derecho en esta recta final. «A Hugo hay que agradecerle el esfuerzo del miércoles, pero tiene molestias y no va a entrar en la convocatoria», dijo Coudet antes de conocerse la lista definitiva.

Ferreyra no estuvo ante el Getafe por sanción y se le esperaba como bala en la recámara ante el Barcelona, pero ayer se desveló que el delantero argentino sufre una rotura en el sóleo y se perderá los dos partidos que le restan, lo que significa que sus días en el Celta están a punto de convertirse en historia.

Semejante panorama deja a Coudet casi sin margen de maniobra. Contará en el banquillo con un lateral izquierdo que no ha disputado un solo minuto en toda la temporada y que el 30 de junio dirá adiós al Celta (Juncà) y a un central, presumiblemente Carlos Domínguez, adscrito al filial pero que jugó los 180 minutos anteriores de esta semana.

En el centro del campo, las bazas de refresco son Augusto Solari, Miguel Baeza y Hugo Sotelo. El argentino es un hombre de absoluta confianza de Coudet y su protagonismo ha ido a más con el paso de las jornadas, todo lo contrario que Baeza, que apenas cuenta para el Chacho. Pese a las vicisitudes en los últimos dos meses, el cordobés solo entró en dos partidos: 4 minutos en el 3-4 con el Sevilla en Balaídos y 22 en el 0-0 de Cádiz. Desde el duelo ante los amarillos, han pasado cinco encuentros sin que el exCastilla pisase el campo. El tercero en discordia es el juvenil Hugo Sotelo, que ya estuvo en la convocatoria para Villarreal. Para la portería, Coudet tiene a un recambio de garantías en el tico Patrick Sequeira, otra de las bajas del filial. Un solar.