Los malos resultados le cuestan el puesto al entrenador tras siete meses
03 nov 2019 . Actualizado a las 23:30 h.El Celta ha anuciado alrededor de las 23.30 horas de esta noche el cese de Fran Escribá como entrenador del Celta. La cuarta derrota consecutiva, encajada esta noche en Balaídos, ha sido el detonante de la decisión después de que el entrenador llevara varias semanas en el punto de mira dados los pésimos resultados cosechados en este inicio de temporada. En el mismo estadio se reunía el consejo del club a la conclusión del partido de la decimosegunda jornada de liga para tomar una decisión.
«Fran Escribá y su cuerpo técnico no seguirán al frente del banquillo del RC Celta», comienza el club el texto de anuncio en su web. Añade que desea «transmitir su más sincero agradecimiento, tanto al entrenador valenciano como a sus colaboradores por su trabajo, profesionalidad y esfuerzo demostrado durante su etapa en el Celta». Y apuntan que «para el recuerdo de la familia celtista quedará la permanencia cosechada la pasada temporada en el marco de A Nosa Reconquista», antes de desearle suerte en el futuro.
Escribá incidía tras el partido en el mismo discurso de sus últimas comparecencias: que se sentía con fuerzas y con el apoyo de los jugadores, pero que partiendo de la base de que en el fútbol mandan los resultados, entendería cualquier decisión. También señalaba nuevamente que aunque le unía un contrato al Celta, su manera de ser no casaba con el hecho de aferrars a él en caso de no haberse visto con posibilidades de revertir la situación. Su preparador físico, Miguel Villagrasa, se despedía a través de redes sociales:
En las últimas semanas, todos los jugadores que se han pronunciado públicamente han cerrado filas con Escribá. El discurso general era que la culpa era de ellos mismos, de los futbolistas, y que estaban a muerte con él, en palabras de Néstor Araujo, o que estaba realizando un gran trabajo, según comentó en su momento Denis Suárez. Paralelamente, la afición era cada vez más reacia a su continuidad.
La etapa de Escribá en el Celta llega a su fin después de siete meses y con siete derrotas en los doce primeros partidos de esta temporada. El entrenador tomó las riendas en marzo de este año convirtiéndose en el tercer técnico que pasaba por el banquillo en la temporada 2018/2019 tras Antonio Mohamed y Miguel Cardoso. Con él y con el papel estelar de Iago Aspas, se salvaba la situación y se conseguía una permanencia que llegó a parecer imposible.
Tras esa salvación casi milagrosa, el club optó por la renovación del técnico, que se puso al frente de un proyecto ilusionante a priori. Los fichajes que se hicieron en verano, con varios jugadores que regresaban a las filas celestes, disparó la ilusión. Sin embargo, las expectativas han estado muy lejos de cumplirse. Escribá se marcha sin haber logrado una sola victoria fuera de casa, aunque siempre mantuvo que estaba seguro de que el equipo firmaría una buena temporada. «Conmigo o sin mí», llegó a decir. Buena o mala, será sin él.
