Emre Mor da señales de vida

X.R. Castro VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

M.MORALEJO

El turcodanés confirma las sensaciones de Vitoria con un pase de gol y sus mejores minutos en el Celta

13 feb 2018 . Actualizado a las 23:57 h.

Buenos minutos en Mendizorroza y mejores en Balaídos ante el Espanyol. Parece que, superado el ecuador de la temporada, Emre Mor da señales de vida y se convierte en un jugador a tener en cuenta en la plantilla del Celta.

El domingo salió más enchufado que nunca. Participativo desde el primer minuto, buscando el desequilibrio por banda izquierda y ganándole en todo momento la partida a su par. Por velocidad y calidad fue capaz de llegar a la línea de fondo y centrar el balón que Maxi Gómez convirtió en el segundo gol del Celta. Después, fabricó un hueco en el balcón del área para poner a prueba a Diego López y ya con el 2-2 lanzó el contragolpe que cogió a Lobotka sin gasolina cuando pisó el área rival.

Ocho días atrás, ante el Alavés, también había entrado revolucionando el juego y percutiendo por la banda izquierda, la demarcación en donde más le ha colocado Unzué hasta el momento aunque el navarro le ve en ambos costados. «Creo que puede jugar igual de cómodo en las dos bandas», comentó.

Medio año después de aterrizar en Vigo, Emre Mor parece haber completado su período de adaptación. Asumiendo el sentido colectivo del juego y la necesidad de sacrificarse en el trabajo defensivo, algo que en absoluto le debe quitar un ápice de su virtuosismo ofensivo. «Viene haciendo una progresión interesante, y además no solo genera lo que nos da en los partidos, sino que también nos da otras cosas», explicó Unzué.

Hasta la fecha el turcodanés ha participado en catorce partidos de Liga, solo uno de ellos saliendo como titular (ante el Las Palmas, hace casi una vuelta), anotando un gol y dando el domingo su primera asistencia. Sumando todos los encuentros de la competición regular su cuota de minutos alcanza los 274, con un máximo de 55 en el terreno de juego (en el Estadio de Gran Canaria) y siendo el jugador de la plantilla actual del Celta -al margen de los recién llegados Mazan y Boyé- que menos minutos disputó en esta Liga.

El gran problema del exBorussia Dortmund venía generado por su ausencia del sentido colectivo del juego. Cada aparición era una sucesión de jugadas individuales que en más de una ocasión acabaron con robo y contra del rival, y que incluso costaron puntos.

Él mismo era consciente de la situación. «Creo que puedo mejorar en muchas cosas, en pasar y en regatear, es algo que me han dicho diferentes entrenadores, y en el apartado defensivo también. Estoy seguro de que puedo conseguirlo con trabajo», comentó después de marcar su único gol de la temporada en Las Palmas.

Ahora comienza a ver la luz. El próximo paso debe ser poner en aprietos a Pione Sisto para el once y asaltar la titularidad. Convertirse en un jugador importante y desequilibrante. Argumentos que llevaron al Celta a hacer el desembolso más grande de la era Mouriño.

1

 Tiros a puerta

En su único intento puso a prueba a Diego López.

1

 Asistencia de gol

Le sirvió a Maxi el balón del segundo gol con un buen centro.

3/3

 Regates

Tuvo un 100 % de efectividad en una de sus especialidades.