Iago Aspas y Denis reconocen lo especial de jugar contra el Celta por primera vez
02 ene 2015 . Actualizado a las 15:12 h.El primer partido del año trae una jornada de reencuentro. Iago Aspas y Denis Suárez se enfrentan por primera vez al Celta que los vio crecer. El moañés con un sitio por conquistar en el once del Sevilla y el de Salceda asentado en la línea de creación y con un futuro increíble por delante.
Para ellos la cita será especial, pero también para los célticos que compartieron vestuario con ellos. El moañés lo reconoce sin tapujos. «Uno siempre tiene ganas de jugar, pero más aún contra el Celta por todo lo que significa para mí», comentó ayer a los medios del club hispalense, mientras admitía que el tráfico telefónico Vigo-Sevilla se había incrementado a lo largo de la semana: «He recibido muchos mensajes de amigos y familiares, porque cuando salió el calendario yo ya estaba pensando en este partido, que para mí es muy especial».
Aspas lleva el Celta en vena. Entró a los ochos años en la factoría de A Madroa y salvo el año de cesión en Bouzas, nunca había dejado de vestir de celeste hasta que el verano del 2013 cuando se marchó traspasado al Liverpool por 9,4 millones de euros, la mejor operación de la era Mouriño.
Denis Suárez se fue más joven de Vigo y lejos de casa las cosas le han ido mejor que a Aspas. En edad cadete el Celta lo traspasó al Manchester City por millón y medio de euros y un año después el Barcelona lo llamó para liderar el filial. Ahora lo ha cedido dos años al Sevilla. El salcedense, aunque estuvo menos tiempo en A Madroa, tampoco olvida sus raíces: «Es el equipo donde crecí, donde me formé como futbolista. Va a ser la primera vez que me enfrento al Celta y será muy especial para mí», dijo en Sevilla.
En el Celta también se acuerdan de ellos y saben de su nivel futbolístico. Sergio creció a la par que Aspas y vio como Denis apuntaba maneras. «Denis é un xogador de asociarse máis, de estar en contacto ca pelota, mentres que Iago é un xogador que rompe moito al espazo y ten moito gol. Ambos son grandes xogadores».
De los dos, quien más empapado está del día a día del Celta es Aspas, que tiene su propio diagnóstico del momento celeste: «Vienen de una mala racha con lesionados y sancionados, pero son un equipo muy difícil sobre todo fuera de casa, porque te condicionan y no te dejan tener el balón», comenta el delantero, que espera tener minutos en la contienda ante sus ex. Iago admite que incluso le preguntan por los vigueses en su propio vestuario: «Me preguntan tanto los compañeros como el míster, porque tenemos que prepararlo para sacar los tres puntos».
No obstante, Aspas apenas ha tenido protagonismo en la Liga con el conjunto hispalense. Sus actuaciones más destacadas apuntan a la Copa, con dos hat-trick al Sabadell y un gol al Rijeka en la Liga Europa. La competición doméstica es su asignatura pendiente, aunque el moañés admite que ya se lo esperaba cuando fichó (una cesión del Liverpool con opción de compra obligatoria): «Yo sabía que lo tendría difícil para jugar cuando llegué aquí, pero no voy a cejar en mi empeño para encontrar una oportunidad. Creo que cuando he jugado lo he hecho bien, pero la competencia es muy alta en este gran club y no es fácil».
Denis es la otra cara, uno de los grandes nombres del curso en el Nervión: «Estoy muy contento desde que llegué, me recibieron con los brazos abiertos y en 2015 espero poder marcar muchos goles y dar muchas asistencias».
Los dos serán una amenaza mañana para el equipo de su vida. Uno con su calidad en el centro del campo y el otro como bala en la recámara para Emery.