Cae una organización criminal de albaneses que asaltó casas de lujo por toda España cuando planeaba entrar en Galicia

GALICIA
Los seis miembros de la banda se dirigían a Lugo cuando su coche quedó averiado a 20 kilómetros de Pedrafita y tuvieron que abandonarlo. Este fue el germen de la investigación
17 ene 2025 . Actualizado a las 20:31 h.La Guardia Civil, en colaboración con la Europol y autoridades de Italia, Francia y Albania, ha conseguido desarticular una banda de ciudadanos albaneses que se había hecho con un botín de unos 300.000 euros tras atracar una veintena de viviendas en diversos puntos de España y de otros puntos de Europa. Los ladrones se quedaron a punto de entrar en Galicia, apenas unos minutos de viaje de entrar en la provincia de Lugo, la cual se cree que era su próximo objetivo.
La bautizada como operación Bizantia se dio por concluida este viernes tras varios años de investigaciones. La causa ha sido coordinada por el Equipo contra el Crimen Organizado (ECO) de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil de Galicia, de forma conjunta con el Equipo Territorial de Policía Judicial de Ponferrada (León), contando con la coordinación de la Unidad Técnica de Policía Judicial de la Guardia Civil. El apoyo de autoridades de otros países, además de la Europol, fue clave para poder descubrir la actividad de esta banda y detener a sus seis integrantes.
Galicia fue el origen de la investigación. Todo comenzó en los últimos días del año 2023. La Guardia Civil llevaba ya tiempo tras una escurridiza banda acusada de haber asaltado viviendas de lujo en Francia, Italia y España, pero poco se sabía de ellos. Mucho menos su identidad y sus próximos objetivos. Sin embargo, un golpe de suerte le abrió el camino a los investigadores.
El germen del caso fue la aparición de un vehículo de alta gama abandonado en Villamartín de la Abadía (León). Se trata de un pequeño núcleo a apenas una veintena de kilómetros de distancia de Pedrafita do Cebreiro, la primera localidad de Lugo y de Galicia entrando a través de la A-6. Para sorpresa de los agentes, el coche, averiado, contenía un tipo de herramientas comúnmente usadas para la comisión de delitos contra el patrimonio, así como distintas placas de matrículas nacionales y extranjeras. Al revelar este hallazgo, la Guardia Civil comenzó a investigar y descubrió que se había denunciado el robo de ese coche en Italia unos días antes.
El caso fue avanzando y los guardias pronto llegaron a una conclusión: la banda pretendía actuar en Galicia, pero la avería que sufrió su coche los obligó renunciar a este plan.
Una larga labor de investigación
Este fue el punto de inicio de unas pesquisas que acabaron con la detención de los seis miembros de una «célula», dice la Benemérita, de ciudadanos de nacionalidad albanesa. Tras ser identificados, los investigadores empezaron a seguir sus pasos. Después de recopilar muchísima información, lograron estar un paso por delante de los asaltantes y predecir sus siguientes golpes. Es por eso que consiguieron atrapar a su líder y a su mano derecha en París (Francia) en verano del 2024. Los agentes creen que se desplazaron a la ciudad para aprovechar la masiva afluencia de turistas con motivo de los Juegos Olímpicos y llevar a cabo una nueva oleada de robos.
Gracias a la labor de las autoridades españolas y francesas, ambos fueron pillados in fraganti y fueron detenidos. Posteriormente, se ordenó su ingreso en prisión. La Guardia Civil ya ha activado los mecanismos para poder trasladarlos a España y juzgarlos en el país donde se originó la investigación.
En octubre, tres meses después de arrestar a los cabecillas, se detuvo a otros cuatro integrantes de la organización. Están acusados de un delito continuado de robo con fuerza en las cosas en interior de vivienda, falsedad documental y pertenencia a grupo criminal. Estaban parcialmente afincados en España. Además, se realizaron cinco registros domiciliarios en Barcelona, Tarragona y Toledo en los que se hallaron múltiples evidencias de su actividad delictiva, así como diversos efectos sustraídos que ya han sido devueltos a sus legítimos propietarios por la Guardia Civil. Además, se logró vincular a los arrestados con otros delitos, como varios robos de vehículos ocurridos en los meses anteriores en Italia o España.
El registro delictivo de la banda incluye asaltos de distinto tipo. Su método la inutilización de sistemas de alarma hasta la fractura de puertas o ventanas para acceder a las casas. Siempre usaban documentación falsa. Eran absolutos profesionales, según sostienen los investigadores. Utilizaban vías de comunicación seguras entre sus integrantes, matrículas falsificadas, y hacían reuniones previas en localidades con varias vías de huida.
La banda solía fijarse en el dinero en metálico y en las joyas de alto valor. Luego, trasladaban su botín hacia el este de Europa mediante otro miembro de la organización. Desplazaban la mercancía usando líneas comerciales y privadas de transporte hasta Albania, lo que complicaba su localización. Podían pasar largos períodos de tiempo sin atacar, pero cuando lo hacían era un no parar. Llegaron a cometer hasta 16 robos en un lapso de 30 días. La Guardia Civil ni siquiera puede asegurar que se conozcan todos los asaltos que protagonizaron. El valor total de lo sustraído podría superar los 300.000 euros.
Existe la hipótesis de que formaban parte de una organización itinerante, más extensa, que actuaba por toda Europa, y que ellos eran solamente una célula de un grupo mayor. La Guardia Civil, por este motivo, no descarta futuras detenciones en otros países.