Bronca entre el presidente del Parlamento y la número dos del PP: «Iso non llo cre nin o apuntador»

Manuel Varela Fariña
Manuel Varela SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

XOAN A. SOLER

El uso del término «dictador» contra Pedro Sánchez en primer lugar, y contra Alberto Núñez Feijoo a continuación, tensiona el final del pleno de esta semana

23 oct 2024 . Actualizado a las 18:49 h.

Suele ocurrir que algún diputado en el Parlamento gallego, fuera de su turno de intervención, se levante de su escaño mientras eleva el micrófono para invocar el artículo 76 del reglamento. Especialmente en su punto tercero, que dice: «Cando a alusión afecte ao decoro ou á dignidade dun grupo parlamentario, o presidente poderá concederlle a un representante daquel o uso da palabra». Al término del pleno de esta semana ocurrió en dos ocasiones, primero desde el PSdeG a cuenta de que una diputada del PP insinuase que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, es un dictador, y en sentido contrario minutos después al emplear una socialista el mismo calificativo para el popular Alberto Núñez Feijoo. Lo curioso en esta ocasión fue que la invocación de este artículo desencadenó en un tenso enfrentamiento entre la secretaria general del PPdeG, Paula Prado, y el presidente de la Cámara, Miguel Santalices, ambos del mismo partido. Y no fue el único esta semana.

El conflicto se originó cuando la diputada socialista Lara Méndez utilizó el término «ditador» para referirse a Alberto Núñez Feijoo, como respuesta a una intervención previa de la diputada del PPdeG, Cecilia Vázquez, quien había insinuado lo mismo sobre Pedro Sánchez al acusar al PSdeG de actuar «ao ditado do ditador». El presidente de la Cámara, que percibía ya que la tensión comenzaba a caldearse en la parte final del pleno, estableció una distinción entre la intervención de Vázquez, señalando que esta «non deu ningún nome», y la de Méndez, quien sí mencionó a Núñez Feijoo, pidiendo a la exalcaldesa de Lugo que retirase la expresión si la había utilizado en el sentido de «algo malvado». Méndez aclaró que se refería a que Feijoo era quien «ditaba nese momento as directrices da Xunta», pero añadió que no tenía inconveniente en retirarlo, siempre y cuando la diputada popular hiciera lo mismo con su referencia a Pedro Sánchez. Santalices optó por retirar él mismo la palabra «ditador» de Méndez y, «consecuentemente», hacerle una llamada al orden a la diputada socialista, pero no en el caso de Vázquez porque esta se refería a alguien que «dita un escrito», y no en un sentido absolutista.

Paula Prado, a quien desde su escaño se la veía ya consultando el reglamento y tomando anotaciones, pidió en repetidas ocasiones la palabra para defender al presidente del PP nacional y exigir que se aplicara el reglamento. «Si, si. Xa sei», trataba de calmar con la mano Santalices hacia el sillón de Prado, quien se quejaba con vehemencia del incumplimiento del reglamento. El presidente de la Cámara trató de dar por concluida la discusión, recomendando a la número dos de Alfonso Rueda evitar «complicar máis as cousas» y aconsejándole que «non sempre hai que ter a razón», lo que provocó varias carcajadas de la oposición, especialmente entre los representantes del BNG.

«Hai que deixar falar aos deputados, aínda que sexamos do PP», alegó la dirigente popular, ante lo que Santalices terminó por prender la mecha: «Iso non llo cre nin o apuntador, pero bueno». Prado logró, finalmente, leer el artículo 76.3 para pedir la palabra, y mirando al jefe del legislativo, preguntó visiblemente molesta: «Eu lle pedín a palabra. Vostede, en base a este artigo, que vai facer, señor presidente?». Santalices reiteró que ya le había dado la palabra y que el asunto estaba zanjando, dando por terminada la sesión.

Esta controversia se suma a la tensión vivida el día anterior en la Cámara entre los portavoces del PP y el veterano diputado ourensano, que al inicio de la legislatura ya anunció que esta sería la última tras casi treinta años en el Pazo do Hórreo. Los populares atribuyeron a un error de la Presidencia del Parlamento el hecho de que la conselleira de Economía e Industria, María Jesús Lorenzana, no tomase la palabra antes de la votación de la ley de recursos naturales. El portavoz del PPdeG, Alberto Pazos, hizo público el malestar de su grupo al señalar como responsable a Santalices, después de que BNG y PSdeG considerasen que la intervención de Lorenzana era contraria al reglamento, como así certificó el letrado presente en la Mesa.