La crisis demográfica pone trabas a la donación en Galicia, que aun así es la quinta en tasa de extracción de sangre y que ha batido un récord histórico en órganos
23 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Han sido, hasta el momento, 18 años cumpliendo puntualmente. Cumpliendo a pesar de la dispersión poblacional y sobre todo a pesar de la crisis demográfica que empequeñece este país, que es ya uno de los más envejecidos del mundo. Han sido 18 años alcanzando la tasa de donación de sangre recomendada por la Organización Mundial de la Salud, de 40 extracciones por cada mil habitantes. En el 2017, en Galicia se produjeron 108.656 donaciones. Eso deja a Galicia entre las cinco comunidades con mayor tasa de donación de sangre. Como una de las más solidarias. Y todo, pese a las dificultades.
El concello más solidario es Padrón, que el año pasado tuvo 105 donaciones por cada mil habitantes. El que alcanzó la mayor tasa de donación en la provincia de Pontevedra fue A Guarda, con 82 donaciones por mil habitantes. En Ourense, A Pobra de Trives tuvo la tasa más alta, de 69 donaciones por mil habitantes, y en Lugo ha sido Meira, con 49 donaciones por mil habitantes.
Lo destaca la directora de la Axencia de Doazón de Órganos e Sangue (Ados), Marisa López García: «Hai que estar sempre alerta». Las campañas de concienciación no pueden descansar nunca, especialmente entre los más jóvenes. «Os doantes van cumprindo anos e temos unha pirámide de poboación con moita xente maior na cúspide e unha base moi estreita». A esa base que se va estrechando cada vez un poquito más es a la que quiere apelar la agencia de donación de Galicia, para que al final cumplir 18 años no solo signifique votar y sacarse el permiso de conducir: que sea también el momento de hacerse donante.
¿Qué es lo más efectivo? Según la responsable de Ados, «é a aposta pola formación dos profesionais e a información á cidadanía, especialmente aos sectores máis novos da poboación». Sus esfuerzos se centran en la creación de una conciencia solidaria en el ámbito educativo, tanto universitario como en otros niveles. De hecho, en el curso 2016-2017 se organizaron charlas que llegaron a más de 5.300 escolares, y a través de tres seminarios de comunicación de malas noticias y siete cursos sobre el proceso de donación y trasplantes se le dio formación especializada a 232 profesionales.
También en lo que a donación de órganos se refiere se han ido dando pasos de gigante. El año pasado supuso en la comunidad un récord histórico. Se alcanzó la cifra de 113 donantes, la más elevada que ha habido nunca y que deja una tasa de 41,9 donantes por millón de habitantes. Además, ha caído el porcentaje de negativas a la donación cerca de siete puntos, y se sitúa en el 21,5 %. Un total de 107.649 gallegos tienen tarjeta de donante, y 4.140 entraron en el registro en el 2017, lo que supone un crecimiento del 37,6 % con respecto al 2016.
El 21,5 % dicen que no
La solidaridad es mayor que nunca, pero sin embargo queda camino por recorrer. Galicia está a cinco puntos de la tasa nacional de donantes y muy por debajo de la de comunidades como Cantabria, con una tasa de 74,1, Navarra y el País Vasco (70,3), La Rioja (71) o Murcia (66). También hay una importante diferencia en lo que a negativas se refiere, pues aunque descienden de manera importante en Galicia todavía estaba en el 2017 más de ocho puntos por encima de la media nacional, que desde el año 2002 se sitúa por debajo del 20 %. Con todo, el porcentaje de negativas en Galicia ha continuado descendiendo en lo que va de año, según confirman desde la Axencia de Doazón de Órganos e Sangue.
Ha aumentado el número de donantes y, con él, el de trasplantes realizados. El año pasado Galicia volvió a batir su propio récord con 340 intervenciones. La mayoría, 160, fueron trasplantes de riñón y 31 de esas intervenciones eran con riñón de un donante vivo. Desde el año 2001 se han realizado 279 trasplantes de este tipo en Galicia, y casi uno de cada cinco de los que se realizan son con riñones provenientes de donante vivo.
Este año se han marcado otros dos hitos. Entre los complejos hospitalarios de A Coruña y de Compostela se ha alcanzado la cifra de 4.000 trasplantes de riñón desde que se inició el programa en 1981 y el hospital compostelano realizó el mes pasado el trasplante número mil de hígado en la comunidad.
El voluntariado crece en Galicia más de un 35 % y la mayoría son mujeres jóvenes
El voluntariado en Galicia es juvenil y femenino. Es lo que dicen las estadísticas que maneja la Consellería de Política Social, que cifra en 7.705 personas las participantes en programas de voluntariado gallego en el año 2017, lo que supone un crecimiento de más de un 35 % en un contexto en el que el voluntariado en España ha caído hasta los 300.000 participantes, según los datos del Observatorio de la Plataforma de Voluntariado en España. A eso hay que sumar un incremento de un 3 % en el número de entidades de acción voluntaria inscritas en el registro gallego, que ya cuenta con 954 organismos en los que participan más de 40.500 personas voluntarias.
¿Existe un perfil del voluntario en Galicia? Sí. Que es voluntaria -el 58 % de los que llevan a cabo actividades altruistas son mujeres- y que además es joven, ya que tres de cada cuatro personas voluntarias tienen menos de veinte años. De hecho, el tramo de edad entre los 3 y los 18 años representa casi el 72 % de todo el voluntariado en Galicia.
La Xunta gestionó el año pasado 17 programas de voluntariado en las áreas de cultura, educación, defensa ecológica y protección del medio ambiente, juventud, ocio y tiempo libre, igualdad y lucha contra la pobreza y la exclusión social en los que participaron 186 entidades de acción voluntaria.
Además, el año pasado se incorporaron dos nuevas áreas de acción voluntaria: medio rural y personas mayores, en las que se han financiado 31 proyectos -lo que supone casi el 32 % del total-. En el caso de las personas mayores, se complementa con el programa Acompaño, que cuenta en la actualidad con nueve entidades y más de un centenar de voluntarios que participan en la mejora del bienestar de los mayores gallegos.