Galicia necesita lluvia, a corto y a largo plazo, pero parece que durante una semana más no caerá ni gota de agua y seguirá haciendo calor
08 oct 2017 . Actualizado a las 12:06 h.Galicia necesita lluvia, a corto y a largo plazo, pero parece que durante una semana más no caerá ni gota de agua y seguirá haciendo calor. Solo a partir del próximo fin de semana se puede apreciar un debilitamiento del anticiclón, situado al noroeste de la Península, y que es el responsable de que no se asome ni una nube por la comunidad. Esta nueva situación puede traer un descenso de las máximas y un incremento de la probabilidad de lluvia, pero este pronóstico habrá que ir confirmándolo a medida que pasen los días.
Mientras tanto, el tiempo seco, soleado y caluroso está garantizado. Las próximas jornadas seguirán registrando temperaturas altas para la época en las horas centrales, frente a las mínimas que son más propias de un mes de octubre. Salvo A Coruña -que se quedará en 22 grados-, el resto de las ciudades gallegas superarán los 25 grados, al menos hasta el miércoles. Ourense incluso estará por encima de los 30 grados
La ausencia de nubes también está provocando que el calor de la tierra se escape por la noche, por eso, las mínimas son bastantes frescas. Una situación que provoca cambios bruscos de temperatura entre el día y la noche. La radiación solar permite que el mercurio suba en las horas centrales y la diferencia entre los valores nocturnos y diurnos puede ser de hasta 22 de grados. Es el caso de Ourense, donde la mínina de hoy no bajará de 9 grados y la máxima es de 31 grados.
El más frío en 21 años
Estas elevadas temperaturas contrastan también con los valores más discretos que se registraron en septiembre. MeteoGalicia explica que ha sido el más frío de los últimos 21 años, al ser las temperaturas medias un grado más bajas de lo normal. El motivo de que no se alcanzaran los valores habituales se debe a que Galicia se quedó en una situación intermedia entre las altas y las bajas presiones, debido a la llegada de aire frío y húmedo, lo que impidió el ascenso de las temperaturas.
En cuanto a las precipitaciones, septiembre tampoco ha sido un buen mes. Llovió un 62 % menos de lo normal y ha sido un mes seco en el norte de la comunidad y muy seco en el sur. Incluso hubo localidades de Ourense donde no llovió nada. La precipitación media registrada fue de 32 litros por metro cuadrado, cuando lo normal es que se recojan en torno a 70 litros. El índice más alto de lluvia se registró en Ferrol, con 113 litros por metro cuadrado y A Mariña fue la única zona donde llovió por encima de lo normal, un 26 % más.