Un Concello que sufrió un duro plan de ajuste por su enorme deuda histórica

l.c.llera PONTEAREAS / LA VOZ

GALICIA

10 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Ponteareas era uno de los ayuntamientos más endeudados de Galicia. En el 2004 debía 25 millones. El gobierno del popular Salvador González Solla tuvo que acometer un duro plan de ajuste. La situación era tan crítica que el Ministerio de Hacienda intervino el Concello reteniendo parte del dinero que tenía que recibir el municipio por su participación en los ingresos del Estado. Cuando Solla abandonó la alcaldía en el 2015 la deuda había bajado a 11,6 millones.

El nuevo gobierno tripartito, encabezado por el nacionalista Xosé Represas y formado también por PSOE y una marea local (A Riada do Tea), ha reducido en dos años los débitos en un 58 %, pasando de 11,6 a 4,9 millones de euros. El Estado sigue fiscalizando y cada tres meses retiene el 50 % de los ingresos que les corresponderían al Concello. Con esta intervención recupera el dinero que Hacienda adelantó en el 2012 para sanear parcialmente las cuentas.

En mayo del 2016, el tripartito logró aprobar el primer presupuesto municipal en seis años. El último databa del 2010. En las cuentas aprobadas el año pasado los ingresos ascendieron a 13.777.053 euros y los gastos a 12.972.722.

En el último ejercicio, las nóminas de 190 trabajadores y de los concejales ascendieron a 5,5 millones de euros, un 42,5 % del total del presupuesto. El gobierno destinó a gastos corrientes en bienes y servicios, 6,1 millones y otro medio millón de euros fue para pagar condenas judiciales, intereses de demora y otros gastos financieros. Este año está prorrogados los presupuestos del 2017.

El tripartito asegura que, por primera vez en la historia de Ponteareas, a finales de año las cuentas estarán saneadas y con remanente positivo para acometer más obras sociales. El gobierno «agradece a los vecinos que entendan que estamos a destinar moitos recursos para pagar os pufos da débeda histórica do Concello e non a mellorar os servizos e infraestruturas municipais. Levamos dous anos poñendo orde económico para poder agora arrancar coa estratexia de cambio». No obstante, en estos dos años se incrementaron un 80 % las ayudas de emergencia, de 60.000 euros a 110.000 en el 2017.