Ladrones a la caza del «smartphone»

Tamara Montero
tamara montero REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

ED Carosía

Los teléfonos móviles más codiciados son los de alta gama: desde el Iphone 6 Plus hasta el Samsung Galaxy

16 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Si pueden hacerse con un teléfono que cuesta 600 euros, mejor, pero en la mayor parte de las ocasiones, los que roban teléfonos móviles roban lo que pueden. Así lo explican desde las fuerzas de seguridad. Los modelos más codiciados son los smartphones, y dentro del abanico de teléfonos inteligentes, los de gama alta: desde el iPhone 6 Plus hasta el Samsung Galaxy. Sin embargo, los ladrones no tienen siempre la oportunidad de ir a por el teléfono que les interesa. Sus modos de actuar no les permiten escoger marca, sino que se hacen con el que pueden.

Según la policía, existen tres modos principales de actuación, aprovechándose siempre o casi siempre del despiste del propietario del terminal. Puede que en una cafetería y, sobre todo en un pub y discoteca, alguien deje el móvil en el bolsillo de la cazadora o en el bolso. El ladrón aprovecha un descuido para meter la mano y llevarse el teléfono. No tiene oportunidad de elegir, y si el modelo con el que se hace no le interesa, lo descarta.

También se aprovechan los ladrones de la costumbre de dejar sobre la mesa el dispositivo mientras se está en un espacio público. Se acercan a la mesa y se lo llevan. Es una de las maneras que les permite saber qué móvil es el que están cogiendo. El tercero se produce en las grandes aglomeraciones. Es el sistema de los carteristas: se acercan a una persona y son capaces de sacarle del bolsillo el teléfono móvil o la cartera sin que el propietario lo note. Los vendedores de telefonía móvil también alertan del uso del conocido como palo-selfie, porque alguien puede utilizar el mismo sistema que cuando se roban de encima de la mesa: cogerlos y salir corriendo.

En muchas ocasiones, los que roban teléfonos móviles intentan después venderlos. En los últimos tiempos se han popularizado las empresas de compra de teléfonos usados, que utilizan el IMEI -un código de identificación de 15 cifras que identifica inequívocamente un dispositivo, algo así como el DNI del teléfono- para comprobar si el móvil es robado. Las compañías de telefonía pueden bloquear un terminal gracias a este número de identificación. El teléfono pasa a una lista negra para impedir su uso y su reventa. En las compañías dejan claro que no comprarán teléfonos robados. Es el caso de Zonzoo, que en su página de dudas dice claramente que «si alguien intenta vendernos un dispositivo electrónico que no sea de su propiedad o que no esté autorizado para la venta, nuestro sistema lo detectará inmediatamente (gracias al número de identificación del terminal) y lo denunciaremos».

Cómo saber si es robado

Sin embargo, el mercado de venta de móviles usados entre particulares está al alza. Entre las recomendaciones para saber si un terminal a la venta tiene un origen ilegal está, en primer lugar, sospechar de precios excesivamente bajos. También se puede comprobar a través de algunas páginas de Internet si el número de identificación del dispositivo es real y si está dentro de esa lista negra de teléfonos móviles robados.