El alcalde, del BNG, invita a todos los concellos a paliar una medida que entrará en vigor el 1 de enero y que Sanidade no considera recaudatoria
05 oct 2013 . Actualizado a las 07:00 h.En línea con la estrategia marcada por el BNG de contrarrestar las políticas de recortes del PP en aquellos municipios en los que gobierna, el municipio de Riotorto, en manos de los nacionalistas, acaba de anunciar que a partir de 1 de enero asumirá el copago de fármacos de dispensación hospitalaria para los vecinos sujetos a tratamientos de leucemia, cáncer de mama o de riñón, tumores cerebrales y hepatitis C, además de todas las patologías incluidas en la resolución del Gobierno publicada en el BOE y que afecta a 157 prestaciones farmacológicas. El gobierno de este Concello lucense invita a otros municipios a que lo imiten. Sanidade declinó hacer ayer ninguna valoración sobre la postura de Riotorto y asegura que el nuevo copago no es recaudatorio. Preguntado sobre si esta medida se extenderá a todos los concellos donde gobierna, el Bloque explicó que la iniciativa se inscribe en una política de oposición al PP, pero que cada ayuntamiento, en función de sus circunstancias, adoptará las medidas que estime oportunas, según Goretti San Martín, responsable de acción institucional del BNG.
En Riotorto podrán beneficiarse aquellas personas con más de seis meses de empadronamiento, en función de la renta del enfermo, de forma que el Concello asumirá o una parte del copago o la totalidad del mismo.
Por otra parte, el Ayuntamiento tiene ya una cierta estimación del coste de esta medida: serán unos 15.000 euros al año, según explicó el alcalde de este municipio lucense, Federico Gutiérrez. La aplicación de la propuesta quedará recogida en una ordenanza cuya aprobación no se debatirá en el próximo pleno sino en el que se celebrará a continuación.
La ordenanza, como avanzó ayer el regidor, fijará ayudas en función de las rentas y el tope será lo más alto posible con la intención de dar cobertura al mayor número posible de vecinos. La idea del gobierno local, formado por un pacto entre el BNG y el PSOE, es clara: «Que ninguén deixe o tratamento por cuestións económicas», subrayó Gutiérrez.