Prescinde de suprimir ediles y fortalece el blindaje de las diputaciones
16 feb 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Primero puso el freno a la reforma de la Administración local y ahora mete marcha atrás para presentar una versión descafeinada de la propuesta original en la que solo queda en pie el blindaje de las diputaciones. Siete meses después de la convulsión que provocó en el municipalismo el plan que Rajoy presentó al Congreso, el Gobierno muda la supresión de ediles por una limitación de los que pueden cobrar. Y propone dejar sin retribución a los alcaldes de municipios de menos de 1.000 vecinos.
Renuncia a recortar concejales. El paradigma de la pérdida de fuelle de las pretensiones del Ejecutivo de aligerar el censo de cargos en la Administración local es la renuncia a recortar concejales. Rajoy, necesitado de un golpe de efecto con el que aplacar el malestar social por las reformas, anunció en julio la supresión del 30 % de los ediles. El golpe era colosal. España perdería 20.538 de los 68.462 cargos electos en los ayuntamientos; y Galicia, 3.811 sobre un total de 3.811. Las ampollas que levantó entre los alcaldes, y la coincidencia con las elecciones gallegas y vascas, provocó un sibilino repliegue del Gobierno, que ante las presiones amagó después con rebajar el recorte al 20 %. Al final, aparca la tijera para restringir del número de ediles con dedicación exclusiva. Hacienda prevé ahorrar con la medida 7.129 millones, frente a los 3.500 del plan inicial.
Propuesta de rebaja salarial. El ajuste retributivo tendrá más impacto entre los regidores de los concellos menos poblados. Aunque el ministerio asegura que los topes salariales se publicarán cada año en la Ley de Presupuestos del Estado, la efectividad de la medida está por ver, ya que el municipalismo esperaba una tabla de carácter orientativo que respete la autonomía local.
Sin competencias impropias. Desde la óptica de los concellos, el aspecto más relevante de la reforma es sin duda la clarificación de las competencias impropias, esto es, de las que los concellos ejercían sin que les correspondiera. El informe determina que las comunidades deberán asumir las de educación y sanidad, y anuncia un período de cinco años para unos traspasos que serán complejos.
Engorde de las diputaciones. El Gobierno mantiene que los «servicios mínimos» de los municipios de menos de 20.000 habitantes pasarán a las diputaciones, que lejos de verse afectadas por el criterio de suprimir duplicidades quedan así reforzadas.
La vocación del cargo público. La reforma, que no se convertirá en ley hasta el 2014, abre un interrogante sobre la vocación del cargo público, al exponer a miles de concejales a ejercer sin derecho a retribución.
Análisis cambios en la administración local