La jueza de la Pokémon llama otra vez a declarar a la concejala de Santiago
GALICIA
La edila comparece tras advertir de que se falseó un informe que la culpaba de dar por buena una deuda con Vendex
23 ene 2013 . Actualizado a las 12:30 h.La concejala de Educación de Santiago volverá a comparecer ante la jueza de la operación Pokémon, en la que se investiga el presunto pago de comisiones y de regalos por parte del grupo Vendex a políticos gallegos a cambio de adjudicaciones. Rebeca Domínguez (PP), que está imputada en el caso por falsedad documental, ya compareció ante la magistrada Pilar de Lara el 20 de diciembre y ahora lo hará otra vez el 4 de febrero.
Todo apunta a que la jueza quiere esclarecer qué ha pasado con el informe que la concejala asegura que fue falsificado y que la responsabilizaba de que el Concello autorizase el pago de una deuda de casi 540.000 euros a Vendex por haber prestado el servicio de limpieza, control y conserjería en colegios y polideportivos de Santiago a pesar de que el contrato ya se había extinguido.
En una reunión del grupo de gobierno de Santiago que se celebró el lunes de la semana pasada, el alcalde, Ángel Currás, también imputado en la Pokémon por tráfico de influencias, presionó a la concejala para que firmase el expediente de reconocimiento de deuda. Domínguez se negó, alegando que supondría validar el informe que avalaba esa decisión y que ella aseguró había sido falsificado porque el texto ahora incluía una coletilla que decía: «O servizo seguiuse prestando de acordo coas instrucións recibidas pola concelleira de Educación».
La apostilla no aparecía inicialmente en el documento, de ahí que la jueza quiera ahora conocer la versión de Domínguez. La concejala afirma que fue modificado posteriormente para perjudicarla y que no se hizo constar esa alteración, ya que el documento volvió a fecharse el 3 de diciembre.
El técnico que hizo el informe es el jefe del departamento de Educación de Santiago, Xosé Manuel Rodríguez-Abella, que también ha sido imputado en el caso Pokémon. A través de su abogado, el funcionario negó que se hubiese producido ninguna falsificación, aunque sí admite que cambió el informe cuando la edila no quiso firmar el expediente y para no quedar él como único garante de que el Concello pagase los 540.000 euros a Vendex.
Currás, que no atendió en aquella reunión a la advertencia de su concejala y se negó a ver el informe original y el modificado que ella le mostraba, ha encargado ahora un informe al secretario para saber si el documento fue falsificado.