La mujer de Narón murió asfixiada y no presenta signos de violencia

f. varela / c. elías FERROL / LA VOZ

GALICIA

La explosión ocasionó grandes daños en la vivienda, algunos de cuyos cristales reventaron, como se observa a la derecha.
La explosión ocasionó grandes daños en la vivienda, algunos de cuyos cristales reventaron, como se observa a la derecha. v televisión< / span>

Los juzgados de Ferrol tienen dos causas por incidentes de la pareja

07 nov 2012 . Actualizado a las 21:28 h.

Marisol Aller Sánchez (63 años), la mujer hallada muerta en su casa de Sedes (Narón) falleció asfixiada. La autopsia no ha revelado que hubiese sido agredida o estrangulada, por eso cobra fuerza la hipótesis de que su marido, Arturo López García (73 años), abrió la espita de una bombona de gas y prendió fuego, y pierde fuerza la posibilidad de accidente. Él se habría quemado las manos al incendiarse el gas antes de colgarse en un alpendre.

La explosión, oída por los vecinos más próximos la pasada semana, se produjo en la cocina comedor, donde fue hallado el cadáver de la mujer. No obstante, los forenses tardarán en elaborar el informe definitivo porque enviaron al instituto forense de la Facultad de Medicina de Santiago muestras de sangre de la fallecida para confirmar la presencia de dióxido de carbono, que ratificaría la asfixia como causa de la muerte. El atestado policial también queda pendiente de estos aspectos, si bien la ministra Ana Mato habló ayer de «asesinato», y fuentes policiales no la desmienten.

Las relaciones de la pareja, casados en 1996, ambos en segundas nupcias, iban cada vez a peor. La supuesta relación de Arturo con otra mujer habría enconado el matrimonio, según testigos. El juicio del 10 de octubre fue por denuncia de él por supuesta agresión (una llamada a la policía, parece que de la nueva mujer decía que «lo tenía amarrado a la cama»). Todo infundado, según dice la jueza en la sentencia. En los juzgados de Ferrol hay dos causas abiertas por incidentes de la pareja, que serán archivadas.

Un vecino ha sugerido que la vivienda era bien ganancial, de manera que Arturo podría intentar con su denuncia que se dictase orden de alejamiento sobre ella y así poder llevar a casa a su nueva novia.