Raíles convertidos en paso peatonal

La Voz

GALICIA

Oscar Vazquez

La paradade Chapela en Vigo fue eliminada el pasado 28 de agosto

25 jun 2012 . Actualizado a las 11:26 h.

En una de las paredes de la estación de ferrocarril de Chapela, en el entorno de Vigo, hay un mural con una gran locomotora entrando en el pueblo. Cuando los trenes que ahora atraviesan las viejas vías que pasan junto al inmueble para ir a repararse a la vieja estación ubicada en Urzaiz dejen de utilizar esos andenes, en Chapela solo podrá verse el tren de la pintura.

La parada fue eliminada el pasado 28 de agosto, cuando el convoy que hace la ruta que une A Coruña y Vigo comenzó a utilizar la vía nueva que va hasta el puerto de Guixar. Hace más de nueve meses que las vías en Chapela están prácticamente vacías. Pese a los trenes que pasan de vez en cuando, los vecinos han comenzado a atajar y cruzan a través de los andenes. Evitan de esa forma dar un rodeo para utilizar el puente que pasa por encima de la vía. No importa que en los alrededores todavía estén en pie las señalizaciones de «Peligro». Parece que no lo notan. Puede ser porque antes el paso de convoyes era muy regular.

En el barrio ya se las han arreglado para poner hasta un pequeño escalón de cemento en los raíles que facilite el ascenso hasta el andén desde la vía. «Lo hizo un vecino», explica una mujer que llena una botella de agua en una fuente que hay justo al lado del andén. Es curioso que se haya conservado ahí, tan cerca del lugar por el que pasaban los trenes rumbo a Vigo.

Han pasado diez meses, pero el abandono empieza a apreciarse en los alrededores de los raíles. «Tenían que cuidar un poco el entorno», advierte una vecina que acude mucho a El Apeadero, un restaurante que hay en el edificio de la vieja estación. Reconvertir esas estaciones en restaurantes es una idea habitual en muchas localidades. Con todo, la eliminación de la parada parece no haber perjudicado a este establecimiento. «Teníamos poca clientela que fuera al apeadero», explican desde detrás del mostrador que hay en el piso de arriba.

Plataformas como Salva o Tren han pedido varias veces que no se levanten las vías de esta línea, al menos hasta que no se construya el apeadero en la ruta que va a Guixar y que está licitado. Hay vecinos descontentos con la retirada de la parada, pero también los hay que no le dan mayor importancia. «Para ir a Vigo hay autobús», explica la vecina que va a la fuente. Y Andrés, que atraviesa con el perro Narco, también está contento con el cambio. Explica que después de mucho tiempo, ahora puede dormir bien. No hay tanto barullo como había.