Aprovechan la noche para instalar en Muros una jaula de salmón

J. M. Sande MUROS / LA VOZ

GALICIA

La concesionaria denunció por coacciones y amenazas a los marineros

25 mar 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Después de varias semanas de vigilancia, los marineros de la ría de Muros-Noia pueden ya bajar la guardia. La empresa concesionaria, North West Food, aprovechó la noche para instalar frente a la playa de San Francisco una de las dos jaulas que, con carácter experimental, autorizó a colocar en la zona la Consellería do Mar. Ahora la cuestión quedará en manos de los tribunales, pues es la única vía que les queda a los afectados, muy indignados con la actuación de la empresa, dado que actuó con «nocturnidade e aleivosía», explican.

Fuentes presenciales indicaron que tres embarcaciones participaron en el traslado de la jaula hasta la bahía. Dos de dichos barcos abandonaron la zona a media mañana y el otro permaneció todo el día en el lugar, presuntamente realizando labores de vigilancia.

Solicitud de información

Fuentes cercanas a la empresa indicaron que el Juzgado de Muros admitió a trámite la denuncia interpuesta por North West Food contra los patrones mayores de las cofradías de Muros y Noia, Daniel Formoso y Santiago Cruz, respectivamente, por coacciones y amenazas.

Desde la firma que promueve la cría de salmón en cautividad en la ría se hace mención a que la juez que instruye el caso ha iniciado el procedimiento solicitando al Servicio Marítimo de la Guarda Civil que le remita el parte emitido el día 16, en el que se detallan los datos de las embarcaciones y de sus propietarios que «impidieron el fondeo del material remolcado para la instalación de la jaula».

Pese a todo, los afectados no se rinden. Aseguran que seguirán luchando para evitar que se instale un polígono de cría de peces en cautividad. Por ahora toman la senda judicial, y sus abogados ya trabajan en la presentación de una demanda.

Aún con la jaula instalada, las movilizaciones siguen tal y como estaba previsto. Por lo tanto, el viernes que viene volverán a Santiago para protestar ante San Caetano. Y es que lo que más les duele, dicen, es que la conselleira les había dado una semana para presentar alegaciones y no respetó ese plazo.