El Servizo Galego de Saúde ha detectado que hay facultativos que aprovechan sus horas de huelga en la sanidad pública para atender consultas privadas. Preguntado al respecto, el secretario xeral del Servizo Galego de Saúde, Cayetano Rodríguez Escudero, explicó a La Voz que han recibido quejas de pacientes de diferentes centros sanitarios que denuncian haber sido atendidos en consultas privadas por médicos que están en huelga en la pública. Según las protestas, esos médicos atienden en la privada a la misma hora en que dicen estar haciendo huelga en la pública. Incluso sucede en centros concertados, es decir, los que reciben financiación de la Xunta.
«Al margen de que esta actuación, si se comprueba, tiene difícil encaje ético», sostiene Cayetano Rodríguez, «el Sergas procederá al estudio de cada caso denunciado por si fuese objeto de adoptar las medidas legales oportunas». Es decir, los servicios jurídicos estudiarán si es legal que los médicos aprovechen la huelga para atender sus consultas.
Hoy es el último día de paro de los médicos, que empezó el miércoles tanto en los hospitales como en los centros de salud gallegos. Los colectivos que más lo han secundado han sido los anestesistas y los cirujanos. Además, buena parte de los médicos residentes (MIR) de especialidades quirúrgicas han seguido la huelga convocada por los sindicatos Omega y CESM, aunque no habían secundado con tanta fuerza los paros anteriores de esos sindicatos.
La Xunta cree que la huelga de los médicos gallegos responde a motivos políticos y económicos. Según el Sergas, la cercanía de las elecciones del domingo ha sido determinante para que los sindicatos médicos convocaran la huelga. Aún más, dicen fuentes de la Consellería de Sanidade, si se tiene en cuenta que se les ofreció una solución a los profesionales el día antes de que empezara el paro y la rechazaron.
La visión de los médicos en huelga es muy diferente. Acusan al Sergas de «jugar sucio», y de maquillar los datos de seguimiento. Según los convocantes, un 70% de los facultativos la secundaron en los hospitales. Según el Sergas, no llegó al 12% en Galicia. Lo cierto es que esta disparidad tiene una explicación. La Administración aplica el criterio de contabilizar cuántos médicos están trabajando de los que debían hacerlo, incluyendo a todos los de los servicios mínimos. Los sindicatos hacen totalmente lo contrario, cuantificando a los servicios mínimos como huelguistas, aludiendo a que muchos la secundarían si pudieran. Esto, evidentemente, provoca cifras totalmente dispares, porque hay servicios en donde los mínimos son el 100%.
Ocurre lo mismo en cuanto a consultas y operaciones anuladas. El Sergas aseguraba ayer que casi el 5% de las operaciones se cancelaron, 45, y un total de 179 agendas de médicos, lo que implica que miles de usuarios se encontraron con su cita del especialista suspendida. Los sindicatos cifraron en decenas las intervenciones aplazadas en cada gran hospital (hay ocho), a los que hay que sumar los comarcales.