Un patrón gallego, retenido por pesca ilegal en el sur del Índico

Félix Soria REDACCIÓN

GALICIA

JOURNAL DE L'ILLE

Fuentes del sector sostienen que la sociedad propietaria del barco tiene capital gallego El patrón de pesca gallego Bernardo Pérez Romay, natural de Castiñeiras, y el capitán del palangrero de altura Lince , el chileno Juan Carlos Jeria Acuña, comparecieron ayer en primera vista ante las autoridades judiciales de la isla de Reunión, en el Índico sur, acusados de pescar ilegalmente merluza negra en el caladero del archipiélago francés de las Kerguelen.

04 feb 2003 . Actualizado a las 06:00 h.

El Lince fue avistado y apresado el pasado día 13 de enero, tras ser sorprendido en aguas jurisdiccionales francesas por la patrullera Nivôse , de la Marina de guerra gala. El capitán del palangrero intentó salvar su buque del Nivôse efectuando una maniobra de despiste, según informaron fuentes de Reunión, pero las pésimas condiciones meteorológicas y la rápida intervención de un helicóptero Panther , que despegó de la cubierta de la patrullera, frustró el intento de fuga. Los militares franceses han presentado ante el tribunal imágenes fotográficas que probarían que el capitán y el patrón de pesca del Lince tiraron por la borda material informático y documentos presuntamente comprometedores. El Lince es propiedad de la firma Pesquera Cisne, con sede en la ciudad chilena de Punta Arenas. A su vez, esa empresa está controlada por la sociedad limitada Marilyn Fishing, también registrada en Chile, pero cuyos accionistas mayoritarios tienen residencia en Marbella (Málaga) y, según fuentes del sector uno de los representantes de la sociedad es de O Carballiño (Ourense). Fuentes francesas han precisado que el Lince , que navegaba con pabellón de las Seychelles y cuyo puerto base es el de Saint Louis, podría formar parte de la compleja trama de piratas pesqueros que operan en aguas del Índico. Merluza en las bodegas En el momento de su captura, el Lince portaba en su bodega un total de 160 toneladas de merluza negra, cuyo valor en los mercados del sur y del sureste asiático, que es donde habitualmente colocan su mercancía los pesqueros ilegales, sería de 1,5 millones de euros, aproximadamente. La tripulación del palangrero Lince , compuesta por 41 hombres, que en su mayoría eran ciudadanos chilenos, ya ha abandonado la isla de Reunión, pues no se han formulado cargos contra ningún marinero. Bernardo Romay Pérez y Jeria Acuña podrían ser condenados al pago de una sanción económica que puede alcanzar los 152.000 euros. En tanto no se resuelva el procedimiento judicial, ambos acusados deben permanecer retenidos en la isla francesa del Índico.