La organización Somos Igrexa critica duramente el despido por parte del Obispado de Tui-Vigo de la profesora de Religión Susana Loureiro. Este colectivo, que pide la convocatoria de un nuevo concilio en el que participen todos los miembros de la Iglesia, considera que una separación matrimonial no justifica la adopción de una medida tan drástica. Para Somos Igrexa, el obispo de Tui-Vigo «en lugar de facer de bo pastor, exerceu de detective privado ó amparo da máis reaccionaria moral católica, que carga ó próximo con fardos insoportables». El caso de la docente viguesa sirve de pretexto a esta organización para denunciar el «abuso continuado» que la jerarquía católica comete contra los profesores de Religión. Así califica de «inxusta» la política de despidos ejercida por algunos obispos con la connivencia del Ministerio y de la Consellería de Educación. En este sentido, la organización hace memoria y explica que desde hace tiempo los acuerdos Iglesia-Estado están devolviendo a un neoconfesionalismo de épocas pasadas que todavía permanece en la memoria de muchas personas. Además, critica la irresponsabilidad del poder político en el caso de la maestra de Vigo al desentenderse del problema, «ó facerlle dicir ó delegado da Consellería: "Non coñecemos os criterios utilizados polo bispo para propoñer ós profesores, nin nos interesan"». Por eso, reivindica que las facultades del obispo para enseñar su doctrina estén limitadas por la legislación laboral y por la primacía de la Justicia.