«Cuíña opina como yo, lo demás es querer amolar»

La Voz

GALICIA

08 mar 2002 . Actualizado a las 06:00 h.

Fraga aseguró al término de la reunión de la ejecutiva del PPdeG que las manifestaciones realizadas el miércoles en el Parlamento por Cuíña, en las que aludió al BNG como enjambre de fanáticos, no contradicen su apuesta por el diálogo ni modificarán «la línea y los acuerdos internos del PP gallego» en esa dirección. «No hay ninguna contradicción», recalcó. «Yo quiero una política civilizada y es lo que mantenemos él y yo, y cualquier otra interpretación son ganas de amolar», zanjó. El líder popular atribuyó la refriega verbal entre el conselleiro y el diputado nacionalista Francisco Trigo a la actitud de «personas que entienden el diálogo llamándole al otro embustero, tramposo y otras cosas». Fraga incidió en que quiere desterrar estas conductas de la política. «Hay pueblos donde los del Bloque y los del PP no se saludan, pues yo quiero que eso termine. Eso sí, sin que ninguno deje de pensar como pensaba antes», comentó. Comida El presidente del PPdeG invitó a Cuíña a la comida con la que acostumbra a agasajar a los presidentes provinciales del partido antes de las reuniones de la ejecutiva. Fraga vio oportuna la asistencia del de Lalín «para que todos estuvieran tranquilos de lo que queríamos decir los dos». Fraga volvió a recriminar la actitud de Touriño ante el nuevo clima político. Tras apuntar que es el primer candidato socialista «que sobrevive a unas elecciones», y que el PSdeG «sigue siendo tercera fuerza», ironizó que Touriño «no ha comprendido bien lo que quiere decir diálogo». El alcalde de A Coruña elogió la «inteligencia política» de Fraga ante el debate de la reforma constitucional. Francisco Vázquez advirtió en Telecinco de que la revisión «permitiría a los nacionalistas solicitar un referéndum de autodeterminación».