El jefe del Ejecutivo gallego contestó a menos de la mitad de los correos electrónicos que le envió La Voz Unos cien correos electrónicos llegan cada mes al buzón oficial de Manuel Fraga, pero no todos consiguen a cambio una respuesta. Al menos seis de cada diez mensajes que se envían a la dirección presiden@xunta.es para consultar sobre cuestiones de actualidad, reciben como contestación el silencio más absoluto, según un estudio realizado por este periódico. El plazo medio de respuesta a los afortunados internatutas que son correspondidos por el presidente de la Xunta es de unos dos días.
17 feb 2001 . Actualizado a las 06:00 h.Problemas que preocupan a los gallegos como el terrorismo, la situación del sector pesquero de la comunidad, así como la crisis provocada por el mal de las vacas locas, son algunos de los temas que se le plantean todos los días al presidente de la Xunta a través del correo electrónico. Una experiencia realizada por redactores de La Voz de Galicia para comprobar el funcionamiento de este sistema de comunicación ha permitido constatar que Fraga responde a tan sólo a algunos de los mensajes que llegan cada día a su buzón. Al presidente no le gusta «chatear». Las más de las ocasiones, el correo electrónico de Fraga se mantiene en el más absoluto de los silencios. Al menos, esa es la impresión que transmite el hecho de que el jefe del Ejecutivo conteste con extremada rapidez a algunos mensajes -dos días son suficientes en la mayoría de los casos- mientras que otros se pierden en el olvido. Incluso si se envían varias veces. Misión imposible Para algunos ciudadanos, conseguir una respuesta de Manuel Fraga sobre el asunto puntual que les preocupa se convierte en una tarea imposible de realizar. Preguntas relacionadas con el envejecimiento de la población en la comunidad, sobre la situación de los emigrantes gallegos en el extranjero y sobre la libertad de expresión en Galicia no recibieron ningún tipo de respuesta. Tampoco obtuvieron contestación las dudas formuladas al presidente gallego sobre el denominado síndrome de los Balcanes, causado por el empleo de munición de uranio empobrecido en la guerra de la antigua Yugoslavia y que pudo afectar a algunos soldados gallegos destinados en Bosnia. En ocasiones, los mensajes de respuesta del presidente de la Xunta se limitan a remitir al ciudadano a las a las páginas web de determinadas consellerías de su Gobierno. En cuanto al idioma empleado, Fraga no tiene inconveniente en utilizar el gallego o el castellano, dependiendo siempre, eso sí, de la lengua en la que se le ha realizado la consulta. Y por lo que respecta al contenido, las respuestas del presidente están siempre encabezadas con un cordial «Estimada amiga» o «Estimado amigo». Pero la mayoría de los correos que envía como respuesta Manuel Fraga apenas arrojan luz sobre las cuestiones que se plantean.