La actriz presenta hoy en Ourense la obra de teatro «La Golondrina», de Guillem Clua, que mañana domingo lleva al FIOT de Carballo. Una obra que ya ha interpretado «casi cien veces» y que, según ella misma cuenta, «funciona de una manera muy mágica»
19 oct 2019 . Actualizado a las 17:08 h.Carmen Maura (Madrid, 1945) es de esas actrices que siempre apetece ver. Un animal escénico que se guía por una máxima, ser simplemente actriz. No le importa si el papel es «para el cine, el teatro, la televisión o un cabaré». Porque el canal es lo de menos. Así es Carmen, una de las grandes de este país. Una mujer que a los 74 años sigue sin perderse en el ruido de lo superfluo. Y se centra en lo importante. Como en La Golondrina, la obra con la que llega esta sábado (20.00 horas, teatro Principal) a Ourense y que mañana a Carballo, al Festival Internacional de Outono de Teatro.
-¿Cómo está yendo la gira?
-Ya la he hecho casi cien veces y si he decidido seguir es porque a la gente le gusta mucho. Funciona de una manera muy mágica. Me gusta mucho esta obra.
-Se inspira en el ataque terrorista a la discoteca gay Pulse de Orlando, en EE.UU.
-Habla, sobre todo, de la comunicación y del cariño de unos a otros y de cómo no hay que perder la oportunidad de demostrarlo porque llega un momento en el que aparece un asunto como el de los atentados y ya no te da tiempo a solucionar los problemas. Por eso le gusta tanto a homosexuales y a no homosexuales, a madres y a hijos. Es muy tierno porque es una madre y este chico, Ramón (Dafnis Balduz); y tanto un personaje como el otro son muy creíbles y, a veces, el espectador está al lado de uno, y otras, al lado del otro.
-¿Qué tal la tratamos en Galicia?
-Pues muy bien. He rodado varias películas y me lo he pasado muy bien. A mí Galicia me encanta. Y luego de pequeña veraneaba en Sanxenxo. Le tengo mucho cariño. Además, una vez ahí tuve un empacho con almejas y, desde entonces, no puedo tomar nada con cáscara. Y recuerdo que me encantaban las nécoras. Me acuerdo mucho, mucho, mucho del marisco y eso que era pequeña. Por lo que me dicen, ahora todo ha cambiado muchísimo. Es que hace casi 50 años. Entonces era precioso.
-¿Con qué se queda, con el cine o con el teatro?
-Yo me quedo con ser actriz. Y ser actriz me parece igual en el cine, en el teatro, en la televisión o en un cabaré. Si tuviera que elegir no sabría.
-¿Se siente ave migratoria?
-A mí me gusta mucho mi casa y Miraflores de la Sierra, el campo. Ya tengo bastantes viajes con los que tengo que hacer profesionalmente. Cuando tengo vacaciones no quiero coger aviones ni nada.
-¿Cree que la edad pasa más factura a las actrices que a los actores?
-Ahora hay papeles fantásticos para mujeres. Está cambiando eso mucho. Para mí la edad no ha sido un problema para tener buenos papeles.
-¿Se ha sentido alguna vez al borde de un ataque de nervios?
-Como todo el mundo, pero normalmente no en público.
-Para muchos, Carmen Maura es Carmen de España, un mito del cine español, la voz de las mujeres reales, ¿eso le ha pesado?
-Cuando me dices todas esas cosas me parece que hablas de otra. No me ha pesado porque no lo tengo muy presente. Tengo muy separada a la actriz de mí. También depende de la suerte que hayas tenido con los papeles que te hayan dado. O de la prensa, ¡yo que sé! Pero no me pesa porque no lo tengo en cuenta.
-¿Es tan difícil rodar con Almodóvar como dice Lluís Homar en sus memorias?
-¡Ah!, ¿ha hecho unas memorias? Pues las tengo que leer. Depende para quién. A mí no me resultaba difícil porque cuando rodaba con él le conocía muy bien y sabía lo que quería.
-¿Qué es lo mejor que le ha dado el cine o el teatro?
-Me ha hecho mucho bien. Ser actriz es lo más divertido que me ha pasado en la vida.
Carballo, pazo da cultura 20.30 horas 15 euros
