«La gente dice barbaridades»

A Coruña / La Voz

FIRMAS

Un debate en la Red sobre el caso del perro abandonado en un contenedor permite la identificación de una supuesta propietaria que se defiende de las acusaciones

15 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Las redes sociales han abierto un duro debate sobre el propietario del perro que apareció en un contenedor en A Coruña y que sufrió graves abrasiones, probablemente debidas al hecho de atarlo a la parte trasera de un coche y hacerlo correr hasta la extenuación. Los comentarios apuntaban a una mujer como supuesta dueña de este bull terrier y tras localizarla reconoció ser la propietaria. «La gente dice barbaridades, hablan sin saber y se inventan cosas. Tengo otro perro que rescaté y eso no lo ven», asegura esta mujer que indicó que el perro se llama Danko y que tiene ocho meses. «Yo lo tenía en Meicende y cuando fui a verlo la puerta estaba abierta. Alguien le tuvo que abrir, el perro no se pudo escapar», dijo esta mujer afectada.

A pesar de la versión que ofrece, el Ayuntamiento coruñés y la concesionaria del centro de acogida de animales de A Coruña explicaron que la mujer tiene que demostrar que es la propietaria del perro porque el chip está a nombre de otra persona que vive fuera de Galicia. También indicó la concejalía de Medio Ambiente que al tratarse de un asunto de maltrato animal, la competencia pasa a la Xunta y a la Fiscalía, que comprobará si los hechos son constitutivos de un delito penal.

Sigue la investigación

Servigal también informa de que el bull terrier se encuentra en las instalaciones que la concesionaria tiene en A Coruña curándose de las heridas y que la Policía ha abierto una investigación para averiguar quién le produjo las heridas al perro con el fin de que estos hechos no queden impunes.

Servigal recibió el aviso el pasado sábado de la presencia de un animal malherido que fue localizado en un contenedor de basura en la zona de Nostián. Una vecina, al acudir a depositar la basura, descubrió un bull terrier con graves lesiones, por lo que dio aviso inmediato a las fuerzas de seguridad. Según explicó la protectora, el animal fue trasladado a una clínica veterinaria para curarle las heridas. En un primer momento se pensó que las lesiones que sufría pudieran deberse a peleas, pero tras el examen veterinario se determinó que se trataban de abrasiones. Aunque no se sabe exactamente qué pasó, se cree que alguien pudo atar al perro a la trasera de un vehículo para hacerle correr hasta la extenuación. Cuando el animal ya no pudo seguir el ritmo del coche, el roce contra el firme le habría producido las terribles heridas que presentaba a su rescate. Ya se han interesado por el perro unas 25 personas, aunque Servigal recuerda que hay más perros en adopción.