«El estado de la ría no es malo, pero sus usos marisqueros y turísticos exigen más»
FIRMAS
En el 2015, dice, estarán listas todas las estructuras básicas de depuración
19 ene 2014 . Actualizado a las 06:58 h.Para Francisco Menéndez, el saneamiento de Arousa es una carrera por etapas. En el 2015 se atravesará la primera línea de meta, cuando la ría esté dotada de todas las depuradoras que necesita. Llegar hasta ahí, reconoce, ha llevado mucho tiempo, entre otras cosas porque «la gente quiere depuradoras, pero no las quiere junto a su casa, y eso no puede ser».
-¿Eso explica que siga habiendo problemas de saneamiento en la ría más rica del mundo?
-Hace veinte años no había nada, y ahora la mayor parte de los ayuntamientos de la ría tienen sistema de depuración. Es cierto que dos depuradoras importantes, como Grove y Ribeira, aún no están funcionando; son las dos infraestructuras básicas que quedan por cubrir en la ría y estarán listas en el 2015. La ría en general, en cuanto a clasificación marisquera, es casi toda zona «B», que es lo habitual para zonas urbanizadas saneadas, aunque sigue quedando como punto negativo -quizás por su propia configuración, muy urbana y muy cerrada- O Saco de Fefiñáns, donde está en marcha una actuación de saneamiento importante.
-Hablando de O Saco, ¿para cuándo estará listo?
-La obra tiene que estar terminada como muy tarde a mediados del 2015. Es una obra que no es excesivamente complicada. De lo que se trata es de controlar bien el agua en tiempo de lluvia, recoger algunas viviendas que todavía no estaban conectadas al saneamiento y separar pluviales de fecales en algunos puntos. Con eso quedará listo y se espera una mejora inmediata de la calidad microbiológica del agua.
-Al margen de las grandes obras, los vertidos siguen aflorando en diversos puntos. ¿Cómo se lucha contra eso?
-En Arousa, la fase de infraestructuras básicas se completa con la construcción de las depuradoras de O Grove y Ribeira. La siguiente fase es volver hacia atrás, hacia las redes de saneamiento, que en algunos casos son muy antiguas, y ver dónde hay que actuar para eliminar los problemas que haya en ellas. Estamos haciendo planes de saneamiento local que son estudios muy a fondo: en un modelo matemático se introduce lo que llueve de media cada año para ver dónde se producen los puntos conflictivos y actuar sobre ellos. Esto lleva tiempo, pero la fotografía es muy buena y permite que las actuaciones que se diseñen tengan un grado muy alto de eficacia.
-¿Hay diagnóstico de las redes de saneamiento de Arousa?
-Tenemos terminados los de los ayuntamientos de Catoira y Vilagarcía; prácticamente listos Cambados, Vilanova y A Illa, y también bastante avanzados Meaño, O Grove y Sanxenxo. Eso nos dará una fotografía muy buena del estado de las redes de saneamiento secundario de la ría. Ahora se trata de mejorar la eficiencia del sistema. En los últimos años todo el mundo se ha ido poniendo las pilas, pero hace falta un último esfuerzo. Hemos tomado la decisión colectiva de depurar las aguas y eso tiene un coste. La decisión colectiva tiene que ser que se cubran los gastos.
-Va a repercutir en el bolsillo.
-En la mayor parte de los casos, ya repercutió en su momento. Pero hay que tener claro que no nos va a costar lo mismo el agua depurándola que sin depurarla, eso es una evidencia.
-Decía hace un momento que las zonas marisqueras de Arousa están calificadas como B. ¿Podemos aspirar a la excelencia de la A?
-Lo importante es asegurar que no haya riesgo de pasar a ser zona «C». Después, si se consigue llegar a zona «A», mucho mejor, aunque las exigencias son altísimas. Pero lo más importante económicamente es asegurar que no se va a pasar a zona «C», que sería la que daría problemas ya que habría que hablar de la reinstalación o del procesamiento industrial del molusco. Los polígonos de bateas están en lugares con más renovación de agua y por eso hay más calificados como «A». Y es que el estado ambiental de la ría no es malo, pero sus usos marisqueros y turísticos nos exigen más porque son valores económicos importantísimos.
-Existe la percepción de que queda muchísimo por hacer...
-Esa percepción existe porque se ve más el vertido que sigue produciéndose que todos los que se eliminaron.
francisco menéndez,