Crespo dice que cuentan con mucho patrimonio y otras prioridades
20 oct 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Entre los potenciales compradores de un edificio céntrico y cargado de historia como el Cine Lalín siempre se puede incluir el Concello, máxime cuando el grupo de gobierno en su momento propuso su conversión en centro cultural y social, e incluso se barajó para albergar el Museo do Títere. Pero no habrá oferta municipal por el inmueble propiedad de la Fundación Novacaixagalicia, que acaba de ponerse esta semana en venta o alquiler. Su precio se estableció en 505.328,8 euros.
El alcalde lalinense, José Crespo, descartó ayer que el Concello opte a la adquisición del antiguo cine argumentando que «neste momento temos moito patrimonio e contamos ademáis con catorce solares, pendentes de vender». El regidor apuntó además que el gobierno local cuenta con otras prioridades en materia de inversiones, entre ellas la restauración del antiguo consistorio o la conversión de la piscina climatizada del Pontiñas en biblioteca municipal. Dos proyectos para los que se busca financiación y que están por delante en la lista de actuaciones, sin que se baraje una iniciativa nueva como podría ser la compra y rehabilitación del Cine Lalín.
Obra Social de Caixa Galicia
Crespo recordaba además las gestiones realizadas en su momento con Caixa Galicia y su entonces presidente, José Luis Méndez, para que se habilitase un centro social y cultural en el cine adquirido por la entidad financiera en el 2008 junto a la contigua Casa Balado. Además se contaría con una sede para la Obra Social de la caja de ahorros, pero el apogeo de la crisis paralizó ese proyecto. El regidor lalinense aseguró que figuraba como el primero a acometer tras la conclusión de los proyectos culturales previstos en las siete grandes ciudades gallegas. «Foi unha lástima que a crise non tardase un pouco máis porque teríamos nese edificio un centro cultural», apuntó Crespo.
Junto con el proyecto de Caixa Galicia también se había gestionado desde el Concello que Caixa Ourense también pudiese activar alguna iniciativa cultural similar. Pero en este caso tampoco prosperó esa opción y Lalín se quedó sin auditorio o centro cultural promovido al amparo de las entidades de ahorro, que complementase las propias instalaciones municipales dedicadas a este fin.
Ahora el Cine Lalín puede cambiar de nuevo de manos o, al menos, recuperar su actividad a través de un alquiler social, ya que la Fundación Novacaixagalicia también activa esta posibilidad en caso de que no logre su venta.