Rois: robótica desde los 3 años

Uxía López Rodríguez
Uxía López ROIS / LA VOZ

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Merce Ares

El centro público Os Dices, premiado por la Agencia Espacial Europea y la NASA, busca la excelencia a través de la tecnología y los idiomas

18 oct 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

El Centro Público Plurilingüe Integrado de Os Dices ha situado el nombre de Rois en el mapa terrestre y en el espacio, de la mano de la robótica, materia en la que es todo un referente. No obstante, las claves de por qué este centro educativo de ámbito rural, con 260 alumnos y 33 profesores en este curso, es noticia a nivel nacional e internacional por sus logros científicos y de otra índole, no están solo en los libros de texto que estudian.

El director del centro, Rodrigo Costoya, apunta a una situación global en la que se dan varios factores, entre ellos el «ambiente de traballo, esforzo e convivencia» que tiene el colegio y que favorece que el «profesor teña gañas de enxeñar e o alumno de aprender». Para el centro, mantener este ambientes es una «prioriedade».

Junto con ello, habla de la «gran motivación e vocación» del profesorado, que dice que hay en todos los centros públicos, pero que en Rois se ve recompensada con la actitud positiva del alumnado y de las familias, que hace «que traballemos máis a gusto, que teñamos máis ganas». A las familias les reconoce su «gran importancia» en la buena sintonía que se respira en el centro.

La fórmula es sencilla: buen ambiente y motivación por ambas partes, y en esas condiciones se desarrolla el proyecto del colegio, centrado en la búsqueda de la excelencia educativa; la innovación y las nuevas tecnologías; los idiomas y las experiencias vitales que desarrollan alumnos y profesores.

Motivación

Y de esa motivación de profesores y alumnos nacen las ideas y arrancan los proyectos educativos, como el de robótica, ya consolidado en el centro después de dar los primeros pasos en el año 2008; otro de edición en vídeo con un canal abierto en una conocida plataforma de Internet en el que dan a conocer muchos de sus trabajos; obras de teatro, premios nacionales por la elaboración de informativos en francés... y otras actividades extraescolares, que son «a seña de identidade» del colegio.

Un clima de convivencia y respeto que permitieron al centro educativo ser pionero en la incorporación de nuevas tecnologías con el proyecto Abalar de la Xunta, implantado en el último ciclo de primaria y primero de secundaria, cuatro cursos en los que cada alumno tiene un ordenador; introducir el idioma inglés en varias asignaturas del ciclo, incluida la presencia de una experta en charla; el ya conocido programa de robótica; y mantener un alto nivel de actividades extraescolares, que en otros centros próximos y del resto de Galicia suprimieron, mientras que en Rois profesores y alumnos están dispuestos a dedicarles la hora de la comida, recreos, sábados y hasta tiempo de vacaciones, como sucedió con la construcción del robot que acaba de ganar en Europa.

Actividades extraescolares que van desde un simple concurso de calabazas a excursiones más destacas, como la que hay programada al Campus do Mar de Vigo.

De todo ello salen los éxitos del centro, del trabajo de profesores y alumnos, de «moitas hora invertidas», y así lo ven incluso desde fuera del colegio, puesto que el CPI de Os Dices tiene alrededor de 15 alumnos a los que no les corresponde este centro pero que quisieron estudiar en él, en ocasiones por cuestiones de familia y otras por elección propia. Podrían ser más, pero el penoso horario del colegio (en educación secundaria hay clases cinco tardes a la semana) y la falta de plazas de comedor echan para atrás a algunas familias, pese a que el CPI de Os Dices es toda una referencia en buscar la «excelencia educativa». Y todo ello, por cierto, en un colegio público, con mayúsculas.

El de ayer no fue un día normal en el colegio de Rois, donde el teléfono no paró de sonar por las continuas llamadas de numerosos medios de comunicación, a los que atendió el director con conexiones en directo para hablar de las claves del éxito del equipo TecnoRoisTres y de todo el centro. Muchos querían hablar con los propios protagonistas, pero los seis alumnos de cuarto curso de ESO y dos profesores del colegio que viajaron a Holanda regresan hoy a casa, tras tener ayer una jornada apretada de actividades, tal y como relató el director.

Entretanto, los más pequeños del centro, los de educación infantil, prepararon una pancarta de bienvenida y de felicitación a sus compañeros. Los mismos alumnos de 3, 4 y 5 años que, desde el año pasado, tienen su primer contacto con la robótica de la mano de unas simpáticas abejas que se mueven solas en un tapete en una u otra dirección en base a las órdenes que les dan y anulan los niños tras contar el número de cuadrados.

Es el primer paso antes de completar etapas según avanzan cursos y poder construir un robot similar al que proclamó al equipo de Rois campeón de Europa del concurso de la ESA.