Coruña Futura propone la creación de un eje económico con Arteixo
02 jun 2013 . Actualizado a las 07:00 h.La consolidación de un eje económico dedicado a la tecnología y la industria entre A Coruña y Arteixo es una de las principales propuestas de Coruña Futura para el desarrollo económico de la comarca. El proyecto de la Fundación Metrópoli destaca el potencial que tendría ese eje, centrado en la avenida de Finisterre y la carretera de Arteixo, rodeado por el puerto exterior de Punta Langosteira, los polígonos de A Grela, Vío, Pocomaco, Sabón y Morás, la refinería, las plantas de Alcoa y Nostián...
La mayor parte de los cerca de 3.500 millones de euros de PIB empresarial que se concentran en la comarca coruñesa pueden ubicarse en esa zona, que alberga empresas de gran peso, comenzando por supuesto por el gigante del sector textil, Inditex, y siguiendo por otras como Ferroatlántica o Makro. Sin olvidar los centros comerciales Marineda City, Comcor y Dolce Vita.
Renovación técnica e industrial
El plan apuesta por reforzar y renovar los polígonos y las actividades industriales ya existentes, fomentar la innovación, implantar centros tecnológicos que aumenten el valor añadido, levantar nuevas áreas logísticas que permitan una distribución de las mercancías más efectiva a través del puerto exterior y los medios de transporte terrestres.
Pero el proyecto también propone una renovación de los núcleos urbanos situados en torno a la avenida de Finisterre y la carretera de Arteixo. Las claves pasarían por concentrar, ordenar y renovar las edificaciones, fomentar el transporte público y mejorar los equipamientos.
La vía que experimentaría una transformación más profunda es la propia avenida de Finisterre y su continuación por San José y Meicende. El planteamiento de Coruña Futura pasa por soterrar el grueso del tráfico rodado, de esa forma las vías de superficie podrían utilizarse como espacios semipeatonales, dotados de mejores servicios y más y mayores zonas verdes.
Con el fin de reducir el impacto ambiental del tráfico y la industria, el plan propone el empleo del ecourbanismo. Las nuevas construcciones se levantarían de acuerdo a los principios de esa doctrina, que apuesta por una expansión urbana menos agresiva con el medio ambiente. De cara al exterior, la novedad más evidente sería la construcción de jardines verticales en las fachadas de los inmuebles.
En la misma línea, el plan propone la conservación de los espacios naturales en todo el eje tecnoindustrial, conectados mediante una senda costera y varios corredores ecológicos en torno a los principales ríos y masas forestales de la comarca.