La Asociación de Empresarios de Transportes Discrecionales de Mercancías de Pontevedra (Asetranspo), estrena presidente. Veterano, con 35 años de experiencia en el sector, Ramón Alonso Fernández, del grupo Dalot, asume el timón de la entidad «en el momento más duro que le ha tocado vivir a este sector». La entidad tiene varios frentes abiertos, pero Alonso reconoce que una de las prioridades es atajar robos como el que él mismo sufrió recientemente. «Hace un mes vaciaron uno de los camiones, allí en Mos, con manguera y garrafa; hacen de vampiros y usan métodos tradicionales».
La asociación, insiste, defiende la creación de áreas de servicio para que puedan dormir los camiones. «Es inconcebible que una ciudad como Vigo, con 300.000 habitantes y a la que llegan camiones de Polonia y Rumanía, no puedan estacionar con seguridad y legalmente». Ramón Alonso apunta hasta el posible emplazamiento. «El sitio ideal es entre O Porriño y Vigo, porque está cerca de la gran zona de consumo pero también de las principales vías hacia la Meseta y Portugal», defiende.
Corrobora la preocupación «porque es un problema que denunciamos hace años». «El gasoil subió un 60 % en estos últimos cuatro y los robos se multiplican», afirma. Sobre las pérdidas para los afectados, Alonso es muy claro: «En estos momentos, los 700 euros de un depósito para un pequeño empresario puede ser el comer o no a fin de mes», advierte. La zona de polígonos próxima la frontera es uno de los puntos negros. La solución, reitera, pasa por habilitar áreas de servicio. No hay ni una en toda la provincia.