El vilagarciano ha debutado esta temporada en la División de Honor con 15 años
10 feb 2013 . Actualizado a las 07:00 h.El 21 de octubre del 2012 forma parte de las fechas que el vilagarciano Martín Regueiro Pombo (1 de mayo de 1997) guardará siempre en su particular cofre del tesoro. En ese día, a Martín le tocó la lotería soñada por cualquier jugador de tenis de mesa de 15 años de un club modesto como el Cambados TM. Estrenarse en la División de Honor. La segunda categoría del deporte de la raqueta corta en España. Su equipo perdió 6-0 frente al Irún Leka Enea.
Martín sustituía a la estrella hispanoamericana del Establecimientos Otero, Jorge Gambra. Y lo ha vuelto a hacer en otras tres ocasiones cuando el jugador franquicia de su club no ha podido competir. De hecho, y salvo imprevisto, Regueiro aún tendrá esta temporada una quinta oportunidad de estrenar su casillero de puntos en la División de Honor, el día 16 en la cancha del Arteal. Una semana después el club volverá a contar con Adrián Vidal como refuerzo tras volver de su estancia temporal en Italia.
Lo de Martín con el tenis de mesa es una cuestión de familia. Su padre, Julio, ya había sido jugador del Cambados TM hace tres décadas, y los dos hermanos de la promesa también tienen una entrada en la historia del club. El mayor, Pablo, de la quinta de Fernando Padín, lo dejó por estudios, pero la pequeña del clan, Nuria, lleva camino de seguir los pasos de Martín. Ambos, de hecho, completaron ayer la fase de grupos del Torneo Estatal de Categorías, que se celebra desde el viernes en Valladolid con los 48 mejores deportistas de cada franja de edad. Martín no tuvo suerte y quedó eliminado en la fase de grupos.
Del Arousa al Cambados TM
El padre de Martín lo animó a empezar a entrenarse en Cambados junto a su hermano Pablo, que ya llevaba un año en la escuela del Liceo Casino de Vilagarcía. Y a los pocos meses ya trabajaban a las órdenes del recién fichado Karol Hasek.
«Xogaba ao fútbol na escola do Arousa. Non sabía nada de tenis de mesa. Ao comezo é duro. O difícil é comezar. Pero unha vez que estás metido, só queres adestrar, adestrar, adestrar», comenta Martín. Hasta el punto de no tener reparo en hacer pública una confesión impropia en un chaval de 15 años: «No instituto, cando ofrecen excursións dunha semana, non quero ir, porque non vou poder xogar. Antes o tenis de mesa era unha afección. Agora non podo estar sen el».
Que se le dé estupendamente bien tiene mucho que ver. Desde su segunda temporada en el tenis de mesa se ha clasificado seis años consecutivos para el Torneo Estatal, la gran cita nacional junto al Campeonato de España. Número 1 del ránking gallego benjamín, alevín e infantil, encabeza su palmarés el título Zonal Norte Alevín Individual del 2009, y el de campeón de España de Dobles Alevín del 2010, con Eduardo Quintela (Oroso). Titular del equipo de Segunda Nacional del Cambados TM, sueña en corto con «facer o meu primeiro punto na División de Honra»; y más adelante, «clasificarme para o Top 10 Estatal como profesional» en un deporte para el que reclama mayor reconocimiento social en España.
mirando al futuro martín regueiro pombo