Uxío López tuvo ayer un público difícil de pelar. Medio centenar de chavales de primero de la ESO del instituto Ramón Cabanillas de Cambados visitaron la exposición que tiene en el pazo de Torrado, Delicatessen, dentro de una de las actividades didácticas que organiza el departamento de Dibujo del centro. No es la primera vez ni la última que el profesor Fernando Arenaz saca a los alumnos de las aulas para darles una clase en conexión directa con la obra artística y su autor. Y tratándose de «un amigo personal y amigo del centro», qué mejor ocasión para llevarlos a ver las pinturas que Uxío expone en Cambados estos días.
Frente al lienzo
Antes de aproximarse físicamente a su obra, los alumnos pudieron acercarse al artista y sus creaciones en clase. Seguro que a más de uno le impactaron las formas y el color que se encontraron en la sala de exposiciones. El propio Uxío se encargó de explicarlo nada más empezar. «Antes dáballe un tratamento como máis sucio ou manchado. Esta exposición ten uns fondos con máis limpeza e máis colorido». Y es que para quien conozca mínimamente la trayectoria de Uxío, Delicateseen le va a sorprender. Un profuso colorido y las referencias a motivos naturales salpican los cuadros que ocupan las distintas salas de Torrado. Hay desde grandes lienzos, el mayor alcanza los 304x230 centímetros, hasta formatos de 15x15 a modo de azulejos. Son los menos y no son fáciles de descifrar, pero en esta colección no faltan modelos figurativos, como es el caso de Ramón Cabanillas. Las arrugas que surcaban su rostro en la última etapa de su vida le inspiraron a Uxío López una de las obras que componen esta exposición y fue ayer parada obligatoria para los alumnos del instituto que lleva el nombre del poeta cambadés.
El instituto prepara otro «Artefacto»
La muestra Delicatessen estará abierta hasta el 4 de noviembre y entonces, el testigo en la sala de Torrado lo cogerá Outono fotográfico. Los alumnos del Ramón Cabanillas, por su parte, seguirán trabajando en clase con el dibujo y demás disciplinas plásticas, y no solo para sacar adelante la asignatura. El instituto presentará antes de acabar el curso una nueva entrega de su particular Artefacto Salnés: una plataforma para acercar a los alumnos a las artes plásticas, como espectadores pero también como creadores. En la edición del 2011, el proyecto contó con el apoyo de numerosos artistas de la comarca, Uxío entre ellos, que dieron un espaldarazo a este peculiar proyecto didáctico, con revista incluida. En el Artefacto de 2011 los chavales recurrieron casi exclusivamente al papel a la hora de dar soporte a sus creaciones, pero la idea es explorar nuevos formatos como el audiovisual. El resultado se verá en los próximos meses.