El año en que ahorramos peligrosamente

La Voz

FIRMAS

23 ene 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

n Adicae (asociación de usuarios de bancos, cajas y seguros) llevamos 20 años defendiendo el ahorro familiar ante escándalos como los de AVA, Gescartera, Fórum y Afinsa, las cláusulas suelo? Pero el recién acabado 2011 ha sido especialmente sangrante. Se ha destapado la comercialización masiva de productos tóxicos como las participaciones preferentes, deuda subordinada o pagarés. Son altamente ilíquidos y la banca los colocó entre los pequeños ahorradores como productos seguros de ahorro. ¿Por qué? La supuesta falta de capital en el mercado bancario hace que las entidades se lancen masivamente y sin escrúpulos a por el ahorro de todos.

Las obligaciones subordinadas han sido comercializadas masivamente entre los pequeños ahorradores. Ahora su valor de mercado es mucho menor al precio al que fueron adquiridas, por lo que los consumidores están acumulando cuantiosas pérdidas, de hasta el 50?%. El Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) no las avala, tienen nulas garantías de cobro en caso de quiebra de la entidad que los emite y mucha menos liquidez que títulos como las acciones.

En los últimos meses la banca ha tratado de captar 50.000 millones en un tipo de inversión que hasta ahora no ofrecía masivamente, y con mucho más riesgo que los depósitos: los pagarés. Tampoco están cubiertos por el FGD. Otro producto estrella, ofrecido a bombo y platillo, son los bonos convertibles, un agujero negro para el ahorrador que supone comprar acciones de la entidad y meter el dinero en renta variable, con posibles pérdidas del ahorro.

El caso más sangrante es el de las participaciones preferentes, un producto perpetuo sin liquidez inmediata ni garantía sobre el capital invertido. Es decir, el consumidor puede tener pérdidas. Su rentabilidad está ligada a los resultados de la entidad. La banca ha creado un alarmante corralito atrapando los ahorros de decenas de miles de ciudadanos bajo la excusa de que no encuentran comprador para dichas participaciones. Un escándalo por el que desde Adicae hemos denunciado ya a 52 entidades.

Si el 2011 ha sido un año negro para el ahorro de los españoles por culpa de los productos tóxicos de la banca, el 2012 debe ser el año en el que los consumidores no demos ni un paso atrás frente a los abusos bancarios. Seguiremos organizando la defensa de los usuarios mediante nuevas reclamaciones colectivas. ¿Seguro que su banco o caja no abusa de usted? Infórmese y denuncie. Sin miedo.