Los cinco concellos del Xuvia exigen a la Xunta más control para evitar los vertidos al río

LA VOZ NARÓN

AS SOMOZAS

De izquierda a derecha, el alcalde de As Somozas, la alcaldesa de Narón, sus homólogos de San Sadurniño y Moeche, y la concejala de Neda Ángeles Puentes
De izquierda a derecha, el alcalde de As Somozas, la alcaldesa de Narón, sus homólogos de San Sadurniño y Moeche, y la concejala de Neda Ángeles Puentes CÉSAR GALDO

As Somozas, Moeche, San Sadurniño, Narón y Neda se unen para hacer frente a las amenazas que sufre este cauce fluvial

05 may 2023 . Actualizado a las 11:35 h.

El fin de semana del 12 y el 13 de febrero, el agua del río Xuvia corría turbia por culpa de los arrastres de una cantera de As Somozas. Los responsables de los cinco concellos por los que discurre este cauce —As Somozas, Moeche, San Sadurniño, Narón y Neda— denuncian que la situación se ha agravado en el último año, «trala entrada en funcionamento de dúas canteiras situadas preto do curso alto do río», en As Somozas. Se trata «dunha nova ameaza para a saúde» del cauce, según recalcan los mandatarios locales, que se suma a episodios pasados de mortandad de peces o malos olores, «que poderían estar ocasionados por verteduras industriais incontroladas».

Estas son algunas de las cuestiones que se trataron en la reunión celebrada el jueves, con presencia de los regidores de As Somozas, Juan Alonso (PP), y San Sadurniño, Secundino García (BNG); las alcaldesas de Moeche, Beatriz Bascoy (BNG), y Narón, Marián Ferreiro (TEGA); y la concejala de Neda Ángeles Puentes. Bascoy se refirió, al final del encuentro, a las denuncias de colectivos y vecinos sobre la situación del río. En la reunión se constató que los problemas de turbidez, «máis acusados cando chove, terían a súa orixe principal nas escorrentías de lama das dúas canteiras explotadas desde 2021 pola empresa Francisco Gómez y Cia. na zona das Viñas [Recemel]». El propio alcalde de As Somozas ha repetido que la empresa cuenta con autorización de la Xunta, a partir de un informe de impacto ambiental que data del año 1996.

Exigen que se cumpla la ley

Ante esta situación, los cinco ayuntamientos exigen que las canteras «cumpran a lexislación en vigor a día de hoxe, co fin de que cesen as verteduras que danan o río». Este problema se suma «a outros padecidos a cada pouco desde tempo atrás, e que son unha ameaza gravísima para unha zona de especial conservación, incluída na Rede Natura 2000», como subrayan los responsables municipales. El olor a hidrocarburos que se extendió por zonas de Moeche y San Sadurniño hace pocas semanas o los peces muertos a principios de septiembre son un ejemplo. Entre otras consecuencias destaca la suspensión temporal del baño en el área recreativa de Soutogrande, en Moeche, o la prohibición del baño en Pedroso por la Consellería de Sanidade.

Los ayuntamientos pretenden coordinarse para realizar «un seguimento máis exhaustivo» del río, e instan a la Xunta y a Augas de Galicia a «actuar de inmediato en materia de vixilancia e control da calidade das augas». También han acordado encargar análisis para «identificar de maneira inequívoca cales son os problemas que sofre o río», puesto que desconocen los resultados de las pruebas efectuadas en los últimos años. «Nin soubemos se se detectaran substancias contaminantes nin se houbo algunha denuncia formal ou sanción por parte de Augas», añaden.