Plata y piedra

Ramón Loureiro Calvo
Ramón Loureiro CAFÉ SOLO

FERROL

Ramón Loureiro

22 nov 2025 . Actualizado a las 19:39 h.

La concatedral ferrolana de San Julián está intentando reunir los recursos necesarios para adquirir un nuevo órgano, que sustituya al que se utilizó en ella a lo largo de las últimas décadas y que, ante el grave deterioro que sufría, ya ha sido desmontado y retirado de su emplazamiento original. Los responsables del templo, y la propia Diócesis de Mondoñedo-Ferrol, están procurando que el órgano nuevo pueda adquirirse gracias al respaldo de la iniciativa privada, a través de la asociación —integrada básicamente por empresarios y personas vinculadas al mundo de la cultura— que se ha constituido, recientemente, para tratar de reunir los fondos necesarios y así poder llevar a cabo la adquisición. Mientras tanto, la concatedral vive estos días, también, la última fase de los trabajos de rehabilitación de la torre sur, que financia la Xunta de Galicia. Unas obras cuyo coste final está en torno a los 318.000 euros (la restauración de la torre norte, que se llevó a cabo anteriormente, costó alrededor de 450.000 euros y también fue financiada por la Administración autonómica).

En la torre sur se va a recuperar, además, la escalera interior, hecha de madera. Y el párroco del templo, Antonio Rodríguez Basanta, quiere que, en el futuro, también esté abierta a los visitantes. La idea, por cierto, es que la concatedral pueda contar, a medio plazo, con su propio museo; un museo que en parte se nutriría con piezas procedentes de las diferentes parroquias ferrolanas, pero que sobre todo serviría para que el templo pudiese dar a conocer, y explicar, el valioso patrimonio artístico que atesora. En especial, su bellísima platería.