Bea Orjales, repostera:«Me encanta animar a mis clientes»

Carmela López
carmela lópez FERROL / LA VOZ

FERROL

JOSE PARDO

Elabora repostería personalizada y en celebraciones especiales como Samaín y el Carnaval atiende al público caracterizada cada día de un personaje diferente

08 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Es el claro ejemplo de lo que se podría llamar una panadera dicharachera. Bea Orjales Pérez (Ortigueira, 1982) es la cara amable y sonriente que está detrás del mostrador del despacho Pan y +, situado en la calle Finca Permuy de Narón, que regenta desde hace casi tres años. «Me encanta animar a mis clientes», dice y, de hecho, lo consigue, aunque para ello tenga que pegarse grandes madrugones para elaborar repostería artesana personalizada y también para caracterizarse, cuando la ocasión lo requiere.

Las tartas, bizcochos y galletas que elabora Bea son especiales, porque las hace a medida del cliente, incluyendo elementos decorativos propios de la celebración de que se trate. «Son galletas más caras que las normales, pero son divertidas y llevan mensaje, por lo que llaman la atención y cuando la gente las ve en la tienda no repara en pagar 1,50 o 2 euros», señala Bea, que estos días está trabajando ya en las que despachará con motivo del Día del Padre.

En función de la época del año, la decoración de la tienda también varía. Así, en Samaín, los esqueletos y calaveras toman vida en el local, que en Navidades se convierte en el hogar de Papá Noel y los muñecos de nieve. Después vienen otras celebraciones, como el Día del Padre, el Día de la Madre. También es la autora de los dulces de Halloween que sirve todos los años el pub Malvada, de Ferrol.

La nota personal

Pero la nota de color la pone siempre la propia panadera con su indumentaria, que, haciendo gala de su gran imaginación, prepara ella misma. Son unos disfraces muy elaborados y que llaman la atención.

Los pasados carnavales se caracterizó de Rambo, de troglodita y de pirata, entre otros personajes. Para ello, durante toda esa semana se levantó a las seis de la mañana, para abrir el despacho a las ocho, con la mejor caracterización. Los clientes lo agradecen y algunos incluso se suman. «Hay gente que algunos días no necesita comprar pan, pero viene igualmente a visitarme, para ver de qué voy», manifiesta Bea, añadiendo que algún cliente también se disfraza para acompañarla y hacerse la foto con ella.

Aficionada a la música

Otra de sus grandes pasiones es la música, que, en principio, se queda solo en una afición, según ella misma remarca, si bien ya hizo algunos pinitos como cantante con el grupo ferrolano The Coldbeers, con actuaciones en el barrio de Canido.

Las manualidades son otra de sus aficiones y la demostración más evidente de que es así está en la repostería que elabora y en el diseño de la indumentaria con la que se caracteriza.

A Bea también le encanta leer, pero la tienda le ocupa la mayor parte del tiempo libre, ya que entra en el obrador a las siete de la mañana, cierra la puerta a las tres, pero hasta las cuatro no sale, porque tiene que preparar el despacho para el día siguiente.