La Asociación de vecinos de Caranza reclama el cierre inmediato de la zona verde para evitar que se siga deteriorando
13 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Casi tres meses después de que se anunciara una intervención inmediata para poner a punto el parque de O Montón, el gobierno local movía ficha. El pasado lunes operarios de Urbaser se ocupaban de eliminar los puntos de vertido incontrolados de esta zona verde, cumpliendo de este modo uno de los compromisos asumidos por el alcalde con la asociación. Sin embargo, tal y como denuncian desde la entidad, la prometida actuación se quedó a medias y las asignaturas pendientes son tanto o más importantes que las aprobadas.
Y es que, en la reunión mantenida el 20 de julio con la presidenta de la asociación del barrio, Mapi Rodríguez, el regidor no solo acordó la urgente retirada de la basura acumulada en el entorno -unos trabajos fijados inicialmente para el 16 de agosto- sino la adopción de medidas preventivas para evitar que los vertidos se repitieran y sobre todo para impedir que los okupas accediera a la segunda de las viviendas que forman parte del área verde, en cuya puesta en valor los anteriores gobiernos municipales -el del socialista Irisarri y el del popular José Manuel Rey- invirtieron del orden de 700.000 euros.
Esas medidas eran fundamentalmente el vallado de las entradas al parque botánico -totalmente abierto después de que robaran los portalones hace meses- y el tapiado del inmueble citado. Ni se instaló la malla provisional anunciada ni se bloqueó ni se movió un dedo para frenar nuevas ocupaciones y el desbroce sigue a la espera de un contrato menor aún por adjudicar. Una situación que la responsable no duda en calificar de «tomadura de pelo» para el barrio.
«Se limitaron a retirar la porquería que acumulaba el okupa de una de las casas», señala Rodríguez Venancio quien anota que este ha trasladado su disposición a abandonar la casa municipal, sin necesidad de iniciar el largo procedimiento de desahucio por el que se ha optado, si desde el Concello se le brindara una alternativa habitacional. La edil de Benestar, Saínza Ruiz, apunta que es un caso complejo y que llevan un par de meses buscando con técnicos y entidades una solución para ayudarle.
La asociación de vecinos demanda a Suárez que cumpla sus promesas y lo insta a actuar con urgencia para evitar que O Montón siga languideciendo.