Cuando Roma perdió el miedo al Lethes

FERROL

Cerca de mil personas asistieron a la derrota castreña ante las tropas de Décimo Junio Bruto

22 ago 2011 . Actualizado a las 13:49 h.

La imagen del río Lethes cuando llegaron las tropas romanas a tierras de A Limia en el siglo II antes de Cristo tenía que distar mucho de la que presentaba ayer. Cuesta creer que el escaso cauce del Limia -solo mantiene un tercio de su caudal ecológico- frenara al batallón por mucha leyenda del esquecemento que hubiera. En aquella ocasión, solo la determinación de su cónsul, Décimo Junio Bruto, acabó con la leyenda de que todo aquel que cruzaba el río se quedaba sin memoria. Muchos siglos después, un actor con micro incorporado se encargó de cruzar el temido Lethes -apenas tuvo que mojarse hasta la cintura- y fue llamando uno por uno a sus soldados, ante los aplausos de los cerca de mil espectadores que reunió el espectáculo a orillas del Limia. Solo cuando comprobaron la cordura de su mando, se decidieron a hacerlo.

Con la leyenda finiquitada, a las tropas romanas les espera otro rival al que temían menos: los castreños. «Terra de galaicos, Roma trae a lei, a orde e a cultura», les advirtió el actor que encarnaba a Décimo Junio Bruto a los castreños, que ante lo que se les venía encima no dudaron en buscar aliados para la dura contienda.

Pese a que el narrador encargado de reescribir la historia de la Festa do Esquecemento se empeñó en varias ocasiones en definir como «terrible batalla» lo acontecido a orillas del Limia, ayer se oyeron más risas que lamentos durante la recreación de la victoria romana ante las «pobres» armas de los castreños. Una vez más volvieron a hincar la rodilla ante un desafiante Décimo Junio Bruto, quien no escatimó insultos para sus rivales antes de la contienda: «Incivilizados que ouvean e non falan, e cheiran mal», le dijo a todo el que ayer lo quiso oír en Xinzo.

Tras la victoria romana, el narrador de la Festa do Esquecemento describió un escenario de convivencia que reinó en tierras de A Limia durante años.