Espasante lucha por su «porquiño»

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Crónica | Una exótica tradición Hoy se celebra el San Antonio en la parroquia ortegana. Y hoy se dedice si este año se recupera la costumbre de alimentar a un cerdo en las calles

12 jun 2006 . Actualizado a las 07:00 h.

?l año pasado saltó la alarma en la parroquia ortegana de Espasante. Durante meses, nadie quiso hacerse cargo de la comisión de festejos de San Antonio -que se celebran hoy-. Las cosas llegaron a tal punto que en el mes de abril de este mismo año, Maruja, Gabriela y Ángeles, que ya habían organizado las fiestas el año anterior, decidieron ponerse de nuevo a la faena. Lo hicieron a las mil maravillas y en dos meses contrataron todo tipo de espectáculos. Sin embargo, al encomendarse tan tarde a la labor, no pudieron cumplir con la principal tradición de Espasante: la ancestral costumbre de que la comisión de fiestas compre un cerdo que durante meses vague a su libre albedrío por las calles del pueblo y que el día de la Lotería del Niño se rifa entre los vecinos. Sin embargo, esa tradición que algunos creían perdida para siempre puede que sólo se haya esfumado de manera intermitente. Hoy se celebra el San Antonio y hoy se debe nombrar a la nueva comisión de festejos. La buena noticia es que tres mujeres ya contactaron con varios vecinos y que, según contaban ayer, «é moi probable que este ano se volva criar o porquiño polas rúas. Non se pode deixar pasar a tradición, é o que fai que o noso pobo sexa máis coñecido». Maruja explicó también que «hai unha veciña que está ofrecida e xa nos dixo que era voluntaria para formar parte da comisión de festas». La vecina en cuestión es Lourdes, quien necesitará de algún voluntario más para poder organizar los festejos, comprar al cerdo y vigilar para que el animal no se pierda por alguno de los lugares de la parroquia. «Deixa moitos cartos» Y más allá de la lucha por recuperar la tradición, Maruja alentaba a los posibles voluntarios con el siguiente argumento: «O porquiño deixa moitos cartos, todo o mundo comprar rifas para ver se lle toca».