Miembros de la junta de personal del Concello en el cuerpo de bomberos municipal han expresado su satisfacción por la posible puesta en marcha del parque de bomberos comarcal, una infraestructura cofinanciada por Xunta, Diputación y once ayuntamientos. Los bomberos ven «positiva» la construcción de esa futura instalación ya que recoge, entienden, gran parte de las demandas que venían reivindicando en los últimos años. «Estamos prestando servicio a otros ayuntamientos que deberían ya tener su propio parque de bomberos, y de esta forma saldríamos de esa cierta provisionalidad en la que nos encontramos», apuntaron fuentes del comité de empresa del cuerpo. El alcalde, Juan Juncal, y el edil de Seguridad, José Manuel Vilariño, han mantenido esta semana dos encuentros con los bomberos para conocer sus demandas laborales antes de poner en marcha el parque comarcal. La falta de acuerdo con el personal ha llegado a poner en riesgo otros parques en Galicia, como el de Santiago. «El primer objetivo es llegar a un acuerdo económico», apuntan fuentes de la negociación. Luego se decidirá el incremento de plantilla para poder afrontar un servicio que dará servicio a más de 163.000 personas. Mesa de negociación Por otra parte, funcionarios del Concello realizaron ayer una protesta frente al despacho de la concejala de Persoal, Marta Cerdido, amordazándose. Así querían significar su reivindicación ante la edil, a quien acusaron de «tener siempre la palabra diálogo en la boca, pero a la hora de la verdad nada de nada». Es la tercera semana en que el personal realiza una protesta. El Ayuntamiento reaccionó tras esa sentada anunciando que la próxima semana se convocará una mesa de negociación con los sindicatos para aclarar la situación de la la Casa de Acogida y el reglamento de la Policía Local.